||Brindo por ti||

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[Pairings: McDanno, past-McRoll, Cath/OC] Drama. Viñeta.

Derrick no necesita ser muy listo para saber que la atractiva castaña sentada a su lado en el bar, con su playera negra y jeans ajustados, no está en su mejor momento; no cuando ella va a por su quinta Longboards sin pestañar. Incluso su aura es deprimente a su lado, su mirada carece de sentimiento alguno y su postura encorvada es lamentable.

Casi da pena verla.

En cualquier otro caso Derrick no hubiera dudado en ignorarla, beber su Corona con una sonrisa ganadora en el rostro y terminar sus papas fritas con queso como si no hubiera un mañana; es un gran plan en todo caso. Pero...

Pero ésta noche no puede dejarlo pasar. Algo le llama a ella, a conocerla o al menos ahogar sus penas juntos; después de todo Derrick ha aprendido a usar flotadores cada vez que sale a un bar a beber.

- ¿Por qué brindamos? -dice el hombre con una sonrisa boba, tal vez si parece un tonto ella no le ignora.

Funciona.

La mujer sonríe pequeño para él antes de llevar la botella a sus labios y beber un trago generoso, es lindo a pesar del riesgo a un coma etílico.

- Mi prometido me abandonó en el altar para fugarse con su mejor amigo... -la castaña se encoje de hombros sin abandonar su semblante triste y patético- ¿Sabes? Las señales siempre estuvieron allí, pero las ignoré ¿Por qué lo hice?

Derrick frunce el ceño levemente mientras se llena la boca de papas fritas, le ofrecería un poco a su nueva compañera pero el plato está casi vacío y él en verdad, en verdad, quiere llenar sus venas de colesterol.

- Tal vez porque tenías esperanzas.

- ¿A que todo fuera como antes? -pregunta ella.

Derrick hace un gesto indiferente, pues en realidad no sabe a lo que la mujer se refiere.

Ella lo ignora.

- Soy Catherine.

- Derrick.

Ninguno ofrece una mano para el saludo, demasiado ocupados bebiendo.

Catherine no va lejos de su postura pobre de mi y Derrick tampoco la de estoy hambriento de papas fritas. Pero está bien, porque al menos ya no son dos desconocidos bebiendo solos en la barra de un bar, ahora son dos desconocidos bebiendo solos en la barra de un bar juntos.

- ¿Qué eres? -pregunta Derrick con la comisura de sus labios manchados de queso.

- Marine -responde Catherine como si no fuera la gran cosa.

- Ah, ya entiendo por que la cara de poker... -agrega él con una sonrisita de suficiencia, como si de alguna manera hubiera cometido una travesura y salido con la suya- Las pruebas del ejército cambiaron mucho...

- Marina.

Derrick se encoje de hombros.

- Es lo mismo.

Catherine niega con una sonrisa en sus labios, Derrick lo siente como una batalla ganada; ella no parece triste ahora.

- Así que... ¿Tú casi ex esposo se fugó con su mejor amigo? Auch -dice él, dando un trago a su vaso.

- Te sorprenderias si te contara la historia completa -responde ella con una risa relajada.

Derrick finge ver en un celular invisible la hora. Él decide que son las 23:08, aunque fueran las dos de la mañana.

- Tengo tiempo, no creo que mi gato me extrañe... Si es que algún día tengo uno -bromea, porque en realidad no tiene mascota alguna- Dispara, Chica Ejército.

Catherine vuelve a reír para girarse en su dirección.

- Marina, Derrick.

Derrick le regala un gesto aburrido, ella no es graciosa.

Ambos levantan sus cervezas -Cath su botella, Derrick su vaso- para finalizar el brindis.

- Brindo por ti, Catherine -dice él antes de vaciar su trago.

McDanno Drabble's Donde viven las historias. Descúbrelo ahora