||Gladiadores||

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[Pairings: McDanno] AU, Gladiator!Steve. Viñeta.

En el interior del Palacio del Rey se llena de bullicio, el torneo de apertura y presentación de Gladiadores ha terminado y los guerreros asignados para éste lo aplauden a por su festín de iniciación. Después de todo, deben aprovechar de lo que será su último banquete -para algunos- aunque ninguno de ellos estuviera realmente preocupado, cada uno de ellos muestra la gracia de un guerrero orgulloso.

Steve, Gladiador favorito a ganar el torneo del Rey éste año, se hace paso entre los hombres para quedar al frente del recinto. Nick y Freddie pronto están a su lado tomando, de sus brazos para guiarlo a la cocina.

- Smooth Dog ¡Ey! -dice Nick con una sonrisa torcida- ¿Dónde demonios está la comida? -gruñe molesto.

Freddie se encoje de hombros, no muy interesado en ello, en su mente solo hay espacio para su prometida y la idea de sobrevivir al mes para volver a verla. Solo ha transcurrido un día y ya la extraña.

Steve, en cambio, sonríe cómplice mientras divisa a un hombre de servicio. Por su forma de vestir, el cabello rubio y la estatura, no le fue difícil saber que es uno de los esclavos del Rey.

- ¡Tú! -grita, haciendo que los demás Gladiadores guardaran silencio- ¡Ey, tú! -vuelve a decir mientras el rubio voltea hacia él- ¿Y la comida prometida? -pregunta alzando los brazos.

Los hombres tras él gritan en apoyo, pero el rubio no se ve ni remotamente sorprendido por ello. Al menos no huye como los demás esclavos, demasiado temerosos para estar con los guerreros.

En cambio, el rubio acorta las distancias con una sonrisa forzada.

- El banquete se servirá una vez que el Rey esté listo, mi señor... -responde el pequeño hombre, logrando que un escalofrío recorriera su espina dorsal- Mi nombre es Danny y lo mantendré al tanto -dice Danny- Le aconsejo que tome un baño, mientras tanto -comenta con la nariz arrugada.

Los Gladiadores se burlan con silbidos y comentarios por lo bajo.

- Oh... ¿Crees que necesito un baño? -pregunta Steve con falsedad.

Danny sonríe sin humor alguno.

- Sólo un consejo.

Steve sonríe dándole una pequeña mirada a Nick, quien sonríe cómplice.

Antes de darse cuenta, Steve toma del brazo de Danny para reducirlo. No es violento, sólo rápido. Toma de su muñeca y la presiona sobre su espalda, no ejerce presión, solamente lo necesario para asustar al rubio y mantenerlo quieto.

- No me digas que hacer -susurra Steve lo suficientemente alto para ser escuchado.

Los hombres a su alrededor lo animan con victoreos.

Danny vuelve a reírse con falsedad.

- Como dije, mi Señor, solo un consejo... -responde el rubio con los dientes apretados.

Steve lo libera aún sin perder la sonrisa en sus labios, siendo animado por todos. En especial por Nick.

Danny se endereza lentamente, sacude su brazo por la ligera molestia y acomoda su cabello rubio hacia atrás.

De pronto, Danny gira su propio cuerpo hacia él y golpea su puño con violencia sobre su quijada; obligandolo a retroceder un paso mientras su rostro es volteado.

Los gritos animados cesan mientras Danny vuelve a sonreír.

- Como dije, el banquete será servido cuando mi Rey esté listo -dice el rubio con calma- Soy Danny, el cocinero real, espero que disfruten su estadía.

Con ello, el pequeño hombre se marcha.

Freddie sostiene a Steve con un gesto preocupado, lo último que necesita es que su compañero se vuelva violento.

- ¿Steve? -pregunta vacilante.

El moreno toca su rostro, observando el caminar de Danny mientras se aleja de la escena. Frunce el ceño sin dejar de acariciar la zona herida.

- Me enamoré.

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