Capitulo 50

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FRIDA KAYENSTON.


Todos nos observamos, nadie dice nada, minutos, minutos, minutos y yo me estoy desesperando, ¿Qué es lo que ocultan? ¿Qué es eso que mis abuelos no me han dicho?

- ¿Y bien? ¿Quién comenzara? –enarco una ceja, me cruzo de brazos.

-Frida... –es mi abuela paso a mirarla. –Siento que no es el momento, pero tu madre nos pidió que fuera en el necesario y creo que es ahora –arruga mis cejas, esta me toma de la mano, ambas tomamos asiento. –A lo que... tu padre se refiere es que... –la abuela baja la mirada. –Tu madre no murió del todo debido a él, aunque su abandono si le afecto mucho –mi abuela vuelve a mirarme. –Frida, tu madre nunca quiso que supieras esto, no hasta que llegara el día y ha llegado.

-Ok... –le miro fijo. –Te escucho...

-Mi amor, tu madre fue diagnosticada con cáncer –el aliento se me esfuma. –Estaba en una etapa muy terminal, y no tenía la oportunidad de luchar por vencerla, ella nos hizo prometer que no te diríamos nada, ella no quería que tú supieras como una enfermedad en cualquier momento iba a terminar con su vida...

-Y yo... –digo en un hilo de voz. –Yo pensé que...

-Que yo había tenido que ver en la muerte de Annie –volteo a ver a papá. – ¿Ves? Yo no tengo culpa de nada.

-Cállate –le digo de inmediato, me coloco de pie, me acerco a él, le miro fijo. –Que mamá pidiera que no me dijeran nada fue por mi bien, sí, es cierto, ella no murió por tu abandono, no del todo –enarco una ceja, le miro de pie a cabeza. –Pero tu sabías que ella estaba en ese estado, ¡Y fuiste incapaz de estar a su lado! –le doy un fuerte empujón, impactando mis puños en su pecho. – ¡Te odio! ¡Te odio! ¡Te odio! –unos brazos me rodean, de pronto me encuentro furiosa, con ganas de seguir atacando a papá.

- ¡Frida, ya mi amor! –mi abuelo intenta calmarme, yo continúo retorciéndome para zafarme.

- ¿¡Qué creíste!? –le grito a mi padre, le miro fijo. – ¡A esta le hago saber que yo no tuve que ver con la muerte de su madre, me sacudo las putas manos y vendrá a mí! –rio a carcajadas, las lágrimas corren por mis mejillas. – ¡Estoy harta que un hombre como tú, recién aparecido, siendo el hombre rico gracias al dinero de una persona quiera imponer sobre mi vida! ¿¡Qué demonios pasa por tu cabeza!?

-Frida, cálmate –es lo único que dice Fabian. –Las cosas debemos hablarlas con calma, no de este modo, no...

-Vete –digo y observo a Fido y su madre. –No tengo nada en contra de ustedes dos, pero la verdad, es que no comprendo como una mujer tan buena como usted continúe con un hombre que le está viendo la cara, es mi padre, pero desde que le hizo a mi madre, lo que hizo, yo no confió en él –Tabatha me observa fijo, creo haber visto un mínimo asentimiento de su parte. –Es mejor que te vayas Fabian, yo, no quiero li...diar... –y me detengo.

Por Favor, Solo Ámame ·Saga Por Favor #1· ★Donde viven las historias. Descúbrelo ahora