Bajhor Hunther
Debo ya dejar de buscar excusas, debo ya de inventarme estupideces para venir con ella, ¡Ya debo dejar de querer quemarme con esta mujer!
Solo fue una jodida noche, una sola y todo el organismo me respondió de la mejor manera, ¿Qué si fue estupenda? ¡Por dios, fue la gloria! Estaba tranquilo practicando mi rutina nocturna de ejercicios y la noche anterior se me paseo por la mente, creí que Frida iba a declinar cada prueba que le ponía, resulto que es más astuta y decidida que yo.
Soporto el vibrador en toda la cena, no se dejó doblegar ni por un segundo y cuando su hermoso pie fue a parar en mi miembro ya no había nada que me detuviera con todo lo que tenía en mente. Desde un principio y desde que probé sus labios quise llevarla de regreso a la habitación, pero al momento de llegar y estar en casa, decline, mas ella me tomo desprevenido exigiéndome ir hasta esta.
Me dio una noche increíble y quería otra dosis de ello, así que con la copia de la llave en mis manos y a una considerable distancia de donde me encontraba ejercitando no me lo pensé dos veces e irrumpí en su departamento. Creí encontrarla al llegar más encontré todo vacío y estaba por irme, pero todo lo tire a un lado en cuanto escuche la puerta abrirse y en ese momento aparecí, haciéndole saber en silencio que me tenía a sus pies.
En este momento me cuesta simplemente apartar la mirada de su enorme y precioso culo, esta de espaldas, caminando de un lado a otro, me gusta la manera en como no se cohíbe de ocultar su cuerpo, sé que le encanta que la mire y para ser sincero, a mí me gusta observarla. No sé qué trama en este momento, estoy recostado en su cama y nuevamente con las jodidas muñecas atadas, esta mujer es lo jodida perdición de mis sentidos, lo admito, mas no pretendo hacérselo saber.
-Bajhor, Bajhor, Bajhor –voltea a verme, observo toda su desnudes, sus senos, su abdomen y caderas anchas, su intimidad, tan hermosa, tan adictiva. – ¿Ves lo que ocurre cuando me tientas? –señala mis muñecas atadas con unas medias, ingenioso.
-¿Qué pretendes hacerme? Debes saber que te estoy dando crédito por ser tu casa, más cuando te tenga en la mía... –la veo enarcar una ceja, ese demonio vestido de mujer comienza a trepar al pie de la cama, a mí se me hace agua la boca. –Cuando te tenga en la habitación nuevamente...
-¿Qué me harás? –se sienta ahorcajadas sobre mí, su cálida intimida chocando en mi pronunciada erección. –Quiero saber –se acerca, su nariz roza la mía, sus senos grandes y hermosos chocan en mi pecho.
-Sabes ese castigo, para la próxima hare que lo obtengas, no importa que –se inclina a un lado y la veo sacar un preservativo de su cajón. – ¿Cuántos tienes?
-Tranquilo, solo uno y hace ya bastante tiempo que estaba allí –se encarga de abrirlo. – ¿Te molesta si lo coloco?
-Para nada, estoy esperando ansioso que te encargues de ello –alzo mis caderas y esta jadea ante el rozar, yo sonrió.
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Por Favor, Solo Ámame ·Saga Por Favor #1· ★
Roman d'amour¡Hey, Bajhor Hunther! ¿Podrías llegar a caer en aquello que te juraste nunca caer? ¿Podrías llegar a sentir atracción por algo que para ti no es atractivo? ¿Llegaras a implorar por un amor que no te mereces? Frida Kayenston sabe lo que es vivir con...