El viaje al pasado de Severus Snape II

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--Soy un viajero en el tiempo.

Los ojos del Lord se abrieron ligeramente al escuchar lo dicho por el chico de cabello negro, estuvo a punto a pedirle que lo repitiera nuevamente pero era algo inecesario, lo que había dicho no podía ser más claro, difícil de procesar, pero claro.

Severus sentía que su corazón se esforzaba cada vez más por seguir latiendo, el viento le arrullo adentrándose en la mansión y creando un sonido escalofriante. Tomó la decisión más sensata al apartarse del Lord dirigiéndose a la enorme escalera que se dividía en dos, poso una de sus manos sobre el pasamanos para apoyarse y comenzar a subir los escalones de esta.—Mi Lord, yo....—Severus trato de buscar las palabras adecuadas para poder dirigirse de forma correcta a este, necesitaba sobrevivir. No quería morir, necesitaba arreglar todo.—Nunca pensé en recurrir a usted, pensé que tenia todo arreglado pero no fue así, me equivoqué. Me traicionaron.

--¿Lo hiciste?—La voz del lord fue un siseó, era lo más parecido a la lengua de las serpientes. Severus se erizó al escucharle hablar justo después de haber revelando su identidad—he de suponer que recurriste a Dumbledore.—murmuró, sin llenarlo de preguntas.

--No se equivoca—Dijo, los latidos de su corazón hacían eco en sus orejas—.Yo fui quien le dio a conocer la existencia de sus Horcrux, fui yo quien le dio su ubicación.

La varita del Lord resplandeció en la mano, tanto que esta chipoteo en la punta. Severus trago ruidoso y su mano se adentró en el bolsillo de su túnica, sacando su varita—¿Realmente quiere luchar, mi señor?—aunque fue imperceptible los dedos de Severus temblaron mientras sostenía la fina madera, un enfrentamiento era lo ultimo que quería— ¿o va escuchar lo que tengo que decir, lo que le tengo que mostrar?.

--Viniste a destruirme. Es lo único que puedo confirmar—Tom Riddle dio unos pasos hacia adelante, pero Severus no retrocedio, permaneció estoico en su lugar—Sabes muy bien las consecuencias de una traición, Severus.

Los labios del chico temblaron, pero se controló y sonrió—Mi señor, fui su Mortifago mas fiel, y aun así usted tomo la decisión de asesinarme. Además... no puede afirmar cosas que no puede comprobar.—Severus se volteó dándole la espalda, y con varita en mano subió unos escalones mas—Su situación en esta realidad, en esta línea del ¿Tiempo? Es mucho mejor que de la que yo vengo, mi Lord. Siempre me preguntó si fue deprimente para usted ser derrotado por un simple bebé.

Los labios del Lord formaron una línea recta, como si se decidiera a creerle o no.—Habla.

El chico detuvo su subida y se volteó para observar nuevamente al mago mayor —Siempre has sido fanático de las profecías ¿No es así, mi señor?—Le dijo, los ojos del lord estaban sobre los suyos, al tener su atención—Fue una quién lo humillo, derroto y produjo su muerte.—Severus decidió bajar unos cuantos escalones—El poder que tiene ahora, no lo obtuvo de donde vengo. La adoración de la comunidad mágica, no la tuvo como la tiene ahora, le hice un favor, mi señor.

--¿A mi? ¿o a Dumbledore?—El Lord se acercó a un más al chico de cabello negro, su varita aún chispeaba exigiendo ser usada—Aquí y de donde vienes, me haz traicionado.

Severus soltó una risita, aunque era por el nerviosismo, continuo bajando los escalones y llego al primero de estos. ---Es así, pero aquí estoy, frente a usted, arriesgando mi vida, Dumbledore no sabe quien soy y si yo no estuviese aquí ahora usted tampoco tendría forma de saber. A él no le dije cosas que a usted... tal vez si le diga. Nuevamente estoy aquí para ser su fiel servidor.

El lord fue quien rio esta vez.—Eres un hijo de puta—Le expresó, esta vez a solo unos centímetros de el, los ojos negros del chico le miraban firmemente, había miedo pero decisión y valentía.—Quiero ver la realidad de donde vienes.