Capítulo-4

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—Chicos ¿ya están listos?—pregunta Adrien,quien se encuentra en el volante del auto,preparado para desde el momento en que tome asiento en el auto presionar su pie hasta el medio y acelerar—Mocosa date prisa que no tenemos todo el año.

Adrien siempre de exagerado, nunca cambiará.
—adiós papá, adiós mamá —me despido de mis padres con un gran abrazo y un beso en la mejilla,debo decir que los extrañaré un montón, espero y con esto puedan pasar tiempo juntos.

—Que tengan un buen viaje, diviértance —dice mamá.

—hasta luego, cuídate mucho princesa —habla esta vez papá.

Todos nos despedimos y Adrien después de casi media hora peleando porque Tony estaba sentado a mi lado,lo cual él no quería, para al final terminar cediendo ya que ninguno quiso moverse por lo que agradezco,terminó por encender el auto y ponerlo en marcha,el resort queda como a tres horas de camino así que nos queda mucho por recorrer.
En el camino Tony y yo entrelazamos nuestras manos,de vez en cuando le molestaba pelliscandole las mejillas cuando todos estaban concentrados,las chicas en sus teléfono, bueno execto Ángela quien se encontraba en el asiento de copiloto toda mal posicionada,con la cabeza recostada de la ventanilla del auto y la boca abierta,en una de esas Adrien detuvo el auto de repente por que la luz del semáforo se había tornado roja ella se asustó,se limpió la saliva que tenía en la cara y volvió a recostarse en la ventanilla del auto,pobre parece que no durmió anoche, aunque literalmente así es en todos los viajes, y Adrien estaba centrado en el camino,puede ser muy divertido, dramático y exagerado pero,cuando se trata de conducir es muy serio,de vez en cuando miraba por el espejo retrovisor en mi dirección,mientras que yo le hacía una que otra cara rara,Tony se reía a lo bajo, supongo que por la acción de dos hermanos y su inmadurez.

No sé en que momento del viaje me quedé dormida pero,me veo obligada a separar mis párpados y abrir los ojos por el sonido de la bocina del auto,el notorio tono molesto de Adrien y las risas de mis amigas al decir "separence par de tortolitos".

Al abrir mis ojos noto que Tony está recostado en mi hombro izquierdo,recién abriendo sus ojos y se pasa las manos sobre ellos en un intento de poder visualizar correctamente,al entender la situación en la que se encuentra se levanta rápidamente de mi hombro.

—¿ya llegamos?— pregunta Tony lentamente.

—no niñato, estamos volando en el cielo —menciona Adrien de forma intimidante para Tony,supongo al ver como se tensa—y a la próxima que te cache haciendo algo como eso con esta mocosa estás muerto ¿entiendes?—Adrien lleva su dedo mayor e índice a sus ojos para seguido guirarlos apuntado en dirección a Tony,  eso hace que éste se tense aún más, lo entiendo un poco Adrien parece un play boy de esos que tienen el cuerpo bien formado,listo para derribar a cualquiera que se interponga en su camino y es que lo es,todos los días hace ejercicios en el gimnasio de nuestra casa eso no me molesta, pero siempre me arrastra con él enseñándome técnicas de defenza y termino exausta.

—sí, lo haré —Tony responde de forma inmediata.

—Adrien no lo molestes—digo tomando a Tony  de la mano y salir del auto.

Los demás también salen del auto, execto Ángela que aún continúa dormida y ahora llenó la ventanilla de su saliva que asco.
Tony y yo nos vamos adelante perdiéndonos de la vista de los chicos, escucho un "mocosa más vale que me esperes"  de Adrien, por supuesto que lo ignoro y sigo caminando de mano con Tony.
De un momento a otro Tony me jala hacia él dándome un fugaz beso cierro mis ojos fuertemente por la rapidez de su movimiento,yo sorprendida lo miro no por mucho ya que vuelve a estampar sus labios con los míos,ahora en un cálido y lento beso,nos vemos obligados a separarnos rápidamente al sentir las risas de las chicas al parecer por otro de los chistes de Ángela y a Adrian quejándose por que según él, me ha perdido de vista.
                                                            ...

𝑺𝒊𝒆𝒏𝒅𝒐 𝒊𝒎𝒑𝒆𝒓𝒇𝒆𝒄𝒕𝒂, ¿𝑨𝒖̀𝒏 𝒎𝒆 𝒒𝒖𝒆𝒓𝒓𝒊̀𝒂𝒔?Donde viven las historias. Descúbrelo ahora