𝑺𝒊𝒆𝒏𝒅𝒐 𝒊𝒎𝒑𝒆𝒓𝒇𝒆𝒄𝒕𝒂, ¿𝑨𝒖̀𝒏 𝒎𝒆 𝒒𝒖𝒆𝒓𝒓𝒊̀𝒂𝒔?

Capítulo- 45

Las noticias o chismes se propagan más rápido que la pólvora dicen, no saben cuanta razón tienen.

—¡Santos tomates rojos!—el grito de Nina al entrar a la habitación me despertó de un susto, imaginé lo peor, el sonido de la puerta siendo estrellada contra la pared me hizo entrar en un estado de alerta inmediato y sin darme cuenta ya me encontraba de pié en posición de pelea.

Lo pero de lo peor es que te despierten con un grito en las mañanas, o que te despiertes al soñar que te caes de un alto piso, o que sueñes que te estan asaltando y te quiten tus  posesiones más preciadas, hay muchos malas formas de despertarse, pero sin duda alguna esta es una de las peores.

Abro mis ojos soñolienta y los froto por unos segundos, hasta adaptarme a la luz de la mañana. Me incorporo aún estando alerta y odservo la ventana, el sol está brillando bastante y se nota su calidez, además las sombras de los árboles son cortas, lo que me hace creer que son pasadas las doce del medio día. Nina permanece con la boca abierta, con una expresión bastante sorprendida, como si hubiese visto un fantasma. La puerta estampada contra la pared, abierta y no se puede quedar, August tirado en el piso con su misma expresión.

—¿Q-qué está sucediendo aquí?—pregunta August titubeante mientras se levanta de el piso y se acerca—¿Qué es esto gorila?—su tono cambia a diversión, y su expresión se vuelve reluciente, tanto como la aterradora cara de la abuela.

Cansada y confundida de sus reacciones inexplicables me despojo de un tirón de la sábana blanda que cubre todo mi cuerpo, la cual cae en el piso por la fuerza con la que la he halado, escucho un gruñido ronco a mi lado cuando lo hago. Entonces me percato que es Asher quien se encuentra a mi lado, y en ropa interior para agregar.

Los recuerdos de la noche anterior llagan a mí, sin embargo, en ninguno de ellos está el que se haya quedado en ropa interior.

—Puedo explicarlo—me apresuro a decir un poco ¿nerviosa? Girandome de repente, lo cual cabe destacar es más que extraño, no es como si hubiese pasado algo malo.

¡Al demonio, con esto tendrán material para molestar un año completo!

Conociendo estos chicos estoy segura de que todavía al mes estarán hablando sobre esto, y no es de esperar después de todo algo como esto es algo que para mí era imposible e inimaginable. Nunca pensé llegar tan lejos con una persona, confesarle mis miedos, mis debilidades y sobre todo mis sentimientos, sin embargo, Asher poco a poco ha ido abriéndose paso el mismo, escarbando en mi corazón hasta establecerse un pequeño lugar en él.

Porque no importa cuanto haya querido negarlo o lo haya hecho, al final no puedes esconder algo que retumba con tanta intensidad.

Todo aquello que nace, crece y mientras más trates de cortarlo, aveces sólo haces que cresca aún más, como alguna mala hierba, así es el amor y  Asher lo hace tan malditamente adictivo que no pude evitar caer, enredandome así en una nueva maldición, con él.

Alarmada dirijo mi mirada a mi cuerpo, las peores ideas llegando e inundando mi cabeza. Suspiro con alivio al notar que traigo la misma ropa puesta y pasando mis manos por mi cabello tratando de disipar el sentimiento de nerviosismo, odservo a los chicos, arrepintiendome de inmediato.

Nina posee una expresión de diversión ligada con sus cejas alzadas y labios apretados en una sonrisa perversa, definitivamente no me dejará tranquila, haciendo preguntas.

Por otro lado August mantiene esa expresión de "Sabía que sucedería" sus ojos virados hacia arriba mordiendo su labio inferior, mostrando sus dientes en una mueca, la verdad es que se asemeja a un caballo enloquecido.