El Oscuro Amanecer

Capitulo 21: Un mal sueño

La noche transcurrió con tranquilidad. Rumble que los había estado espiando, había dormido detrás de aquella roca enorme. Estaba contento porque por fin Veigar se había abierto completamente a otra persona, lo que parecía del todo imposible hace solo unos meses, por otro lado, también estaba feliz por Lulu y pese a no conocerla desde hace tanto como al mago, rápidamente le había cogido cariño.

Cuando se levantó todavía era bastante temprano, los primeros rayos de sol comenzaban a despuntar sobre el horizonte y la suave brisa matinal mecía la hierba provocando un efecto visual en el paisaje, como si fueran las olas que el mar arrastra contra la orilla. De su mecha sacó una pequeña mochila, de donde agarró un par de huevos fescos para cada uno. Con una pequeña sartén de hierro que se había traído con el por si era capaz de cocinar algo, se puso manos a la obra. Quería darles una sorpresa a esos dos que dormían plácidamente más pegados que un sello a un sobre.

Rumble: jejejeje....vaya, si que les gusta dormir a estos dos, pero no los culpo el día de ayer fue bastante agotador. -dijo para sí mismo mientras le daba la vuelta a la primera pareja de nuevos.

El olor que estos desprendían rápidamente entró por la nariz de Lulu y como si de un zombie se tratara, se levantó y con paso lento y dando pequeños tumbos llegó a ponerse delante del mecánico que la miraba con una sonrisa divertida. Estaba completamente embobada, el sueño aún la tenía presa de sus efectos.

Lulu: ummmmm.....¿a....que huele...?

Rumble: jajajaja...buenos días Lulu ¿que tal has dormido? estoy preparando unos huevos fritos para cuando os despertarais, espero que tengáis hambre porque hay un par para cada uno. - mientras la pequeña hechicera se quitaba las legañas mañaneras, Rumble prosiguió con su labor, termiando así en un par de minutos más el desayuno. Una vez hubo terminado se acercó a Veigar y con cuidado, dándole pequeños meneos logró despertarlo a regañadientes.

Veigar: uggghhhh....¿no ves que aún es muy temprano?....uggg....maldita sea Rumble...déjame descansar. -se quejó

Rumble: oye no es por nada, pero tu querida Lulu ya se ha despertado y me ha dicho que quería esperare para que comierais juntos y añade que se muere de hambre, por lo que amigo mío no te merece la pena hacer esperar a una dama hambrienta. - el si que sabía cómo motivarlo.

Veigar se levantó de un salto tras que  Rumble le dijera eso, aún así lo miró con mala cara por haberle despertado tan temprano. No eran más que las siete y media de la mañana, de normal aún estaría en la cama hasta que La Luz que se colaba por sus cortinas lo hiciera despertar.

Se levantó, se lavó la cara con un poco del agua del manantial y se dirigió hacia dónde habían hecho la fogata la noche pasada. Lulu estaba allí, con las manos juntas, apoyando su barbilla en ellas y mirando hacia la nada más absoluta (vamos, lo que hacemos todos al despertar XD).

Veigar: b-buenos días Lulu ¿estás bien? - la saludó el mago de manera torpe al recordar lo que había pasado el día anterior. Por su parte, Lulu no le dio demasiada importancia y se limitó a levantarse del suelo para llegar hasta el mago y darle un beso en la mejilla, provocando que este se pusiera más rojo que un tomate.

Lulu: jejeje si, estoy bien. Buenos días Vei, gracias a ti e podido dormir a gusto, como hace tiempo que no hacia. - normalmente se pondría hecho una furia si lo llamaba así pero...en fin ya no importaba, si ella quería llamarlo así le dejaría hacerlo.

Veigar: emmmm.....m-me alegro, en fin....ehhhh... - ¿que le pasaba de repente? ¿se había vuelto alguien incapaz de articular más de dos palabras seguidas con sentido al estar en frente de ella?

Rumble: ¿vaya, vaya....ha pasado algo que no me habéis contado? - le picó el mecánico

Veigar: ¡¡c-claro que no...!! ¡¡Deja de sacar conclusiones estupidas en tu cabeza Rumble o créeme que esta será la última advertencia que te haga!!! - el mago iba en serio y no se cortó ni tres a la hora de ponerle el bastón en frente de los ojos. Rumble por su parte tragó saliva y asintió con la cabeza varías veces para hacer ver qué si que había captado la "indirecta"