-¿Entonces... ese Cornelius es tu ex? -preguntó curioso Harry, haciendo un tono de voz chistoso en la mención de su nombre.
-Algo así, no fuimos novios oficiales pero salimos mucho tiempo y me hizo daño -conté mirando las copas- Es un tonto engreído como todos los chicos que asisten aquí.
-Es un idiota entonces -bramó- Me sorprende que salieras con alguien así, tu no eres superficial ni tonta.
-Gracias -sonreí levemente-, lo sé. Fueron errores de la adolescencia.
-Pobre chico, lo mataron con ese nombre -Harry y yo volvimos a reír fuerte. Que el rizado se haya burlado de su nombre en su cara fue épico.
Por fin divisamos a Zayn y Aly pero, antes de llegar hacia ellos, Harry me tomó suavemente de la muñeca y nos detuvo.
-Yo...te quería decir que estás muy bonita hoy, b-bueno siempre lo estás -musitó con un deje de nerviosismo. Sentí ese rápido bombeó en mi corazón y mis mejillas calentarse un poco. Sus ojos verdes brillaban como los diamantes.
-Gracias, Harry -sonreí-, tú también estás muy guapo.
-Hice mi intento -se encogió de hombros.
-Lo hiciste muy bien -aseguré. Miramos hacia al frente y los chicos nos hicieron señas llamándonos. Cuando llegamos con ellos le tendimos la champaña.
-¿Por qué tardaron tanto? -preguntó Zayn bebiendo del champán.
-Harry probó el Seviche y le gustó -comenté riendo. Zayn hizo una mueca al igual que Aly.
-Asco -dijeron los dos. Ambos se miraron asombrados y rieron cómplices. Por dios, ¿Pueden admitir estos dos que se gustan?
-Es muy bueno -defendió Harry.
-¿Qué hacemos ahora? -preguntó Aly, mirando como el salón ya estaba lleno y las mesas ocupadas.
-Esperar que el evento comience, digan unas palabras, cuánto donó cada familia y bla bla. Y después podemos escaparnos, ¿Les parece? -sonreí traviesa y eso hizo que mis amigos asintieran rápidamente de acuerdo con mi plan.- Bien, vamos a sentarnos en esa mesa vacía.
La mesa estaba a pocos metros de nosotros y al fondo, así estábamos lejos de todo el mundo. Zayn se agarró unos platos de bocadillos y dulces y los llevó a la mesa con nosotros. Harry se sentó a mi lado y a mi otro extremo Aly, al lado de ella Zayn. Hablamos de estupideces por un rato y luego un mesero nos trajo más champaña.
-Mira a esa señora de allá -le susuré a Harry. Era una mujer como de cincuenta años con bótox y un collar de perlas en su cuello-. Se ha divorciado como cuatro veces, su actual esposo, el señor a su lado, es empresario pero le es infiel con otro hombre.
Harry abrió grande los ojos y ahogó una risa.
El evento comenzó pero no le prestamos atención a lo que decían.
-Le encantan los chicos guapos y jóvenes, como tú -agregué.
-Cállate -se rió mirándome con diversión.
-El hombre calvo a dos mesas adelante -señalé- es un desgraciado. Golpea a su hijo, iba conmigo en la escuela, y a su mujer.
-Que horror -Harry hizo una mueca con desagrado.
-Esa chica de allá, Daisy, la castaña de vestido rosa -indiqué a la mesa de al lado-, tiene diecinueve y es la amante de un hombre casado de cuarenta años, debe estar aquí también. El señor es socio de su papá. Dicen que ella es su amante desde que tenía diecisiete años.
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skin [h.s]
FanfictionCuando Addy conoció a Harry en aquella tienda de tatuajes, se encontró fascinada por el arte en su cuerpo y no imaginó los secretos ni el dolor que escondía bajo su hermosa piel llena de tinta. Un agobiado y desesperanzado Harry no se esperó que alg...