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Después de contarle a Aly todo lo que había pasado desde mi primera vez con Harry, la inesperada llegada de Charlie, hasta el pleito entre ellos dos y el asunto del robo y las drogas, mi mejor amiga se había quedado muda por diez minutos. Me miró con los ojos y la boca bien abiertos, probablemente con el cerebro haciéndole corto circuito por toda la información, como a mi. Ninguna de las dos se imaginó que mi hermano y Harry hubiesen hecho algo así, que se conocían del pasado y que escondían ese gran secreto. Uno que les trajo muchos conflictos.

Me entendió cuando le dije que me había ido de mi casa porque no tenía cabeza como para lidiar con todo en ese momento, pero claramente tenía que dejar que ambos me explicaran como había sido y por qué lo habían hecho. Charlie no tenía razones para robar dinero, porque económicamente hablando, mi familia tenía y no había motivo para hacer aquello. Suponía que esto iba más allá, era cuestión de problemas personales con la persona a la cual le había robado dinero y luego todo se salió de control. O simplemente una estúpida e irresponsable idea pensando que todo le iba a salir bien. No lo sé, aún no tenía ni idea.

Pero Harry... sabía que su vida no había sido para nada sencilla, pasó por mucha mierda, todo lo que me había contado rompió mi corazón. Y pensaba que me había contado toda su historia, pero claramente omitió lo más importante, lo más serio y delicado y me lo ocultó. No soy quién para obligarlo a que me cuente sus secretos, sé desde el principio lo reservado que era y a unas personas le toma mas tiempo abrirse y confiar que otras, pero esto de alguna forma me involucraba a mi. No tenía idea desde cuando Harry sabía que Charlie era mi hermano, me dolía pensar que me estuvo mirando a los ojos y me escuchó hablar de él, ocultándome todo esto y yo ignorante a la verdad.

Aún así no lo odiaba y no podía juzgarlo aún, su mirada era muy sincera como para pensar que era una mala persona. Simplemente tengo mucha incertidumbre y decepción.

Aly me acariciaba el cabello mientras ambas estábamos acostadas en la alfombra en silencio muy pensativas. Moría por estar entre los brazos de Harry escuchando música y sentir su calor reconfortante, mirando esas esmeraldas brillantes que tanto me gustaban. Quería retroceder el tiempo y volver al increíble día de ayer.

Mi teléfono seguía apagado desde que salí de mi casa en la tarde y podía imaginarme los cientos de mensajes y llamadas que tenía de los dos chicos que mas quería y me tenían molesta y triste en estos momentos. 

No pretendía encenderlo, mañana afrontaría toda la situación.

Después de un largo rato en silencio, Alyssa habló.

—Hay algo que quiero contarte...

—¿Qué es? —pregunté girando mi cabeza para mirarla desde el suelo. Aly rascó su cuello con nerviosismo.

—Eres mi mejor amiga y también sé que eres la persona que menos me juzgaría y me entendería, ¿cierto?

—Claro que sí, obvio —me apoyé en mis codos para observarla mejor.

—Esto no es fácil, no quería decírtelo hasta estar segura, es decir, aún estoy algo confundida pero creo que ya lo entiendo —movió sus manos y soltó un largo suspiro— Okay, aquí vamos...

Fruncí las cejas y la miré expectante cuando guardó unos segundos de silencio, finalmente abriendo la boca para contarme.

—Conocí a alguien, bueno, me gusta alguien y he estado viendo a ese alguien...

Abrí mis ojos grandes y me senté recta. 

—¿En serio? ¿¡Quién es?! —pregunté emocionada. Aly se mordió el labio y miró sus uñas negras desgastadas.

skin [h.s]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora