skin [h.s]

♡27♡

Me observé en el espejo cuando terminé de colocarme las botas tobilleras negras, examinando si era mi decisión final. Usualmente no era de probarme demasiados conjuntos cuando iba a salir, usaba lo primero que encontrara.

Pero hoy Harry me había invitado a salir a un lugar sorpresa, como una cita, y creo que había tenido una pequeña crisis de nervios porque nada de lo que me ponía me convencía. Tenía muchísima ropa, pero de pronto sentí que no tenía nada.

Por un momento me sentí Cher en Clueless, con todas las prendas regadas por el piso y quejándose que no tenía nada que ponerse.

—¿Qué opinas, Tommy? —me giré hacia mi gato, que reposaba perezosamente en mi cama. Él levantó la cabeza un poco y movió la cola— Yo creo que está bien ¿Verdad? Es decir, saldremos como cualquier otro día pero esta es la primera vez que Harry nombra la palabra cita y me puse nerviosa.

Tommy maulló y volvió a mover la cola.

—A veces quisiera que hablaras, sería divertido —me acerqué y acaricié su coronilla— dejaré la puerta entre abierta por si quieres salir, pórtate bien.

Agarré las llaves de mi auto y de casa y bajé las escaleras dando pequeños saltos ansiosos. En la entrada principal no había nadie pero escuché voces en la oficina de mi papá. No me detuve a despedirme, ya les había dicho que tenía planes hasta la noche.

Manejé hasta la casa de Harry, sabía que iba una hora más temprano de lo que me había dicho pero honestamente estaba muy aburrida y ansiosa, y como él no trabajaba hoy, supongo que no había problema en llegarme un poco antes.

Dejé el auto estacionado cuando llegué y me extrañó no ver el de Harry. ¿Habría salido? Toqué el timbre dos veces y al poco tiempo abrieron la puerta, apareciendo Zayn detrás de ella.

—¡Hey! —sonrió simpáticamente pero luego borró un poco su sonrisa y aclaró su garganta— uh, Harry no está.

—Me acabo de dar cuenta, no está su auto. ¿Salió hace mucho? —pregunté con curiosidad.

—Creo que...hace como una hora.

—Ah, ¿y sabes a dónde fue?

—Ehhh, honestamente no, creo que al supermercado o algo así —dijo pero noté un deje de nerviosismo en su voz. Entrecerré los ojos pero Zayn abrió la puerta y me dejó pasar— Igual dijo que no tardaría mucho.

—Está bien, es que saldremos dentro de un rato pero estoy viniendo una hora antes de lo planeado, estaba aburrida —le expliqué y reí levemente.

—Tranquila, espera aquí, esta es tu casa también —sonrió y se lanzó al sofá a continuar viendo la televisión. Me senté a su lado a conversar un poco pero minutos después me levanté para ir a la cocina.

—Prepararé un poco de café, ¿Quieres?

—¡Sí! Me vendría bien uno de esos, está haciendo frío —se aferró a su suéter a pesar de que la calefacción de la casa estaba activada.

—De acuerdo, no tardo.

Prendí la cafetera, agregué las cucharadas de café y esperé que el agua se calentara. Justo cuando el café comenzó a hacerse, la puerta se abrió y se cerró de golpe, haciéndome sobresaltar, y pude distinguir claramente la voz de Harry, sonaba molesto.

—Odio a Nathan, joder, te lo juro. ¡Me está haciendo la vida imposible!

—Harry...—Zayn le llamó como con advertencia.

—Se está aprovechando de mi el imbécil, ¿Puedes creer que...?

Dejó la frase al aire cuando sus ojos abiertos de par en par, se posaron en mi parada en la cocina. De pronto luciendo sorprendido y nervioso.