𝒥𝒶𝓂𝒶́𝓈 ♡

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Jihoon entró agitado, el libro que necesitaba lo sujetaba con una de sus manos mientras que con la otra se apoyaba del marco de la puerta, dejó escapar un suspiro de cansancio y termino de entrar correctamente, se acercó a SeungKwan y a SeungCheol con una sonrisa en saludo.

—Lo siento Cheolie, tarde un poco más pero mamá insistió en meter un poco más de comida — su sonrisa se desvaneció al ver la expresión de SeungCheol, sus cejas se mantenían juntas y sus labios temblaban ligeramente. Se Inclinó para quedar a la altura del castaño.

Lo observó por un momento, analizando su rostro que se mantenía bajo, sus ojos vacilaban, como si quisieran huir de la mirada de Jihoon. Después de que lo analizo, volvió el rostro hacia SeungKwan, Jihoon se levantó lentamente — ¿Quién fue? — Inquirió, con voz fría, sus ojos se entonaron en el momento que sus cejas se fruncieron.

SeungKwan estaba asustado, no era la primera vez que veía esa actitud en Jihoon, el miedo recorrió su espina dorsal, podía sentir como su cuero cabelludo hormigueaba — Jihoon.. Y-Yo — Su voz se quebró, no pudo producir otra palabra. Una ligera capa de sudor se hizo presente, sintiendo como las gotas recorrían desde su frente hasta su cuello.

—¿Quién fue? — Preguntó Jihoon nuevamente, manteniendo su tono de voz frío.

Su corazón se calmó un poco cuando SeungCheol jaló de su ropa, llamando su atención, de inmediato volvió a inclinarse y tomó las manos de mayor.

SeungKwan soltó un pequeño suspiro de alivio, por unos instantes pudo sentir la energía tan fría alrededor de esa pequeña figura.

La vista de Jihoon se incrustó en las irritadas manos del mayor, apretó los labios con fuerza, conteniendo su ira. Inhaló y exhaló relajando cada uno de sus músculos, su expresión también cambio, abrió las palmas del pelinegro y comenzó a acariciarlo con mucho cuidado, una amable sonrisa en su rostro, mientras sus delicados toques recorrían las manos ajenas; de pronto las levantó un poco y las besó, como si quisiera sanarlas con ese acto.

SeungKwan los miró, era como si una burbuja los rodeará y los separara de todo, no era la primera vez que ignoraban todo a su alrededor. Siempre, no importaba el lugar, ellos lo hacían único y especial para ambos.

El corazón de SeungCheol latía con fuerza, sus mejillas se sonrojaban, siempre lo hacían cuando se trataba de Jihoon, pero ahora sus pensamientos estaban convertidos en un total desorden. La emoción de tranquilidad se peleaba con la intranquilidad, si Jihoon descubría quien lo había molestado a tal punto de dejarlo casi en Shock, el no dudaría en ir y golpearlo.

El mayor no quería que eso ocurriera, las palabras de Soonyoung no parecían ser una broma.

—Cheolie, lo siento, no debí dejarte solo ¿te hiciste más daño? — Su voz fue blanda, buscando que el mayor se sintiera tranquilo. El lo conocía y sabía que detrás de ese rostro inexpresivo, de encontraba un SeungCheol hecho un caos.

SeungCheol negó con la cabeza, sus ojos seguían sin mantener contacto con los del blanquecino.

—Debió ser duro para Cheolie — Acarició su cabeza con ternura, ignorando los murmullos de los demás alumnos.

—Lo siento Jihoon — Habló SeungKwan de repente, llamando la atención del blanquecino, este se levantó y le sonrió.

—No fue tu culpa, siento lo de hace un momento, fue mi reacción momentánea.

SeungKwan negó muchas veces, moviendo sus manos de un lado a otro, miró a SeungCheol por el rabillo del ojo y dejo caer sus hombros — Lo encontré en el suelo, no había nadie a su alrededor — explicó, realizando algunas muecas.

—No te preocupes, aunque SeungCheol no quiera decirme nada, lo sabré en cualquier momento — Su voz firme, mantenía una ligera pizca de furor.

—¡No! no.pelees

Jihoon se giró ligeramente, observando al dueño de aquella voz que le ordenaba, miró a SeungCheol con el ceño fruncido — Me conoces perfectamente, sabes lo que haré.

Los ojos de SeungCheol se ensancharon, sintiendo su corazón encogerse. Jihoon jamás le había negado algo, jamás le había respondido de esa manera.

Sus labios se separaron para decir algo más, por un momento dejando su timidez a un lado, pero el profesor entró al aula pidiéndole a todos que tomarán asiento. Observó al blanquecino sentarse sin decir una sola palabra y sin mirarlo.

¿Lo estaba ignorando?

SeungKwan los miró un poco incómodos, era la primera vez que ellos parecían estar distantes.

Por otro lado Jihoon sentía como su corazón podía dejar de latir en cualquier momento por haberle respondido de una forma tan fría al mayor, pero está vez no se quedarían las cosas así.

Capitulo doble el día de hoy, ya que mañana posiblemente no pueda publicar ✌️

Mi pequeño Bravucón (JiCheol)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora