𝒞𝒽𝒾𝒸ℴ𝓈 ♡

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Soonyoung no asistió a la escuela por algunos días, cundo regresó lo hizo con su padre, quien  ya tenía una cita con el rector y la madre del blanquecino para resolver el conflicto que ambos jóvenes habían tenido.

El padre de Soonyoung había resultado ser todo lo contrario a su hijo, en todo momento fue amable y pidió disculpas al escuchar a Jihoon contar lo ocurrido y por qué había reaccionado de un manera violenta.

El chico de cabellos rizados tenía un rostro entre morado y rojizo, algunos golpes ya estaban sanando a diferencia de los restantes. Soonyoung acepto que su actitud no fue la correcta y confirmo que todo lo que el bajito había dicho era verdad, que el había molestado a SeungCheol y lo había tratado mal a pesar de haber notado que había algo raro en el mayor. Jihoon frunció el ceño al escucharlo decir la palabra raro.

El padre del chico se disculpó con la señora Lee y ella lo imitó, se disculpó avergonzada, después de todo su hijo había golpeado brutalmente al suyo; pero también le agradeció que le haya pedido al rector que no tomara represalias contra el blanquecino.

El señor Kwon le dijo que su hijo no era del todo el agredido, que por favor dejara el asunto como un pequeño tropiezo, después de todo ambos habían aprendido algo de este lío. La señora Lee suspiró afligida, sabía muy bien que después de esto Jihoon no dudaría en volverlo a hacer.

Después de eso los días transcurrieron sin problema alguno, Soonyoung no había vuelto a molestar y ni siquiera les dirigía una mirada. Así que Jihoon lo dio como asunto olvidado.

Estaban en su hora de comida cuando SeungKwan tomo a Jihoon y se lo llevo casi arrastrando, dejando a SeungCheol junto a los dos altos.

Mingyu y Wonwoo comían relajadamente, de vez en cuando observando al mayor que los miraba impaciente, como si quisiera decirles algo. Pero como ambos sabían que SeungCheol no hablaba mucho y no sabían descifrar sus miradas al igual que Jihoon, decidieron seguir comiendo.

— Wonwoo, tu comete los tomatillos — Ordenó Mingyu tomando uno entre sus palillos y colocándolo en los labios ajenos, el pelinegro los recibió un poco disgustado pero no protestó — También el arroz de SeungKwan.

Wonwoo no había terminado de masticar correctamente y se tragó lo que tenía en la boca sintiendo como raspaba su garganta — No me pidas demasiado.

— Es que hoy no tengo ganas de arroz y por alguna razón SeungKwan preparo una lonchera especial para mí — Se quejó realizando un puchero, el brillo de sus ojos parecía apagarse mientras sus cejas se contraían ligeramente.

— Pues claro, tu lo molestaste, ahora hazte responsable.

— No ayudarás a este pobre joven, que te ama.

— Yo no te amo — Dijo entre dientes, apretando sus labios para no dejar escapar una sonrisa traviesa.

— Está bien, lo compartiré con alguien que me ame — dijo ofendido, volviéndose hacia el otro lado, dándole la espalda al pelinegro. SeungCheol los miraba un poco sonrojado, no sabía cómo actuar al verlos así.

Era extraño.

De pronto la lonchera desapareció de las manos de Mingyu, el alto se giró para ver cómo Wonwoo comenzaba a comerse el arroz de a bocados grandes, casi tragándolo sin masticar. En ese momento su corazón brincó de alegría, los latidos podían describirse como gritos de felicidad proviniendo de su interior.

— Después lloraras porque te van a rechazar, mejor evitemos eso — aclaró Wonwoo con la boca llena.

— Chicos…

El más alto estaba apunto de hablar cuando escucho una voz desconocida, su entrecejo se arrugó levemente mientras escuchaba como Wonwoo comenzaba a toser a causa del arroz que comía.

— ¿Podrían ayudarme?

La voz volvió a golpear sus oídos, no era delgada ni gruesa, sino de un tono medio, miraron hacia los lados hasta que sus miradas se posaron en el chico de cabello castaño, que apretaba sus rodillas nervioso.

— Por…favor

Está vez sintieron como un escalofrío recorría sus espaldas — ¿SeungCheol? — Dijeron al mismo tiempo, mirando al mayor sin parpadear un segundo, por miedo a que todo fuera una confusión.

— Soy yo — Sonrió inquieto, tragando grueso al sentirse extraño — ¿Podrían ayudarme?

Mi pequeño Bravucón (JiCheol)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora