Capítulo 19 - Socialización

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[Capítulo  19 — Socialización]

—¿Qué has decidido?— preguntó el peli verde.

—Yo… voy a confesarle mis sentimientos a Law— contestó totalmente decidido.

—¿Estás seguro?— cuestionó el rubio.

—Sí, el que no arriesga no gana. Apostaré todo en esto, estoy seguro— y su tono de voz apoyaba por completo sus palabras, nada lo haría cambiar de opinión.

—Entonces bien— dijo Zoro al momento en que él y Sanji se pusieron de pie.— Pero tampoco debes de apresurarte demasiado, necesitas buscar el momento y el modo adecuado para decirlo.

—¿Y cuál podría ser ese momento?

—Pues, eso dependerá de la situación— contestó el rubio.

—¿Tú como se lo dijiste a Sanji?— preguntó dirigiéndose al peli verde.

—Esa es una historia muy larga… que no te contaremos hoy, será mejor que nos vayamos— empezó a caminar hacia la puerta y el rubio lo siguió, tratando de eludir la pregunta de su amigo.

—Eeh, pero Zoro— pero el peli verde no le respondió. —Sanji— miró al otro como pidiéndole que lo ayudara.

—Mejor déjalo, Luffy— contestó el cocinero.

—¿Pero entonces cómo sabré cuándo es el momento adecuado?— preguntó siguiéndolos hasta la puerta.

—Lo único que tienes que saber, es que la ocasión se presentará, y tú tendrás que reconocerla y aprovecharla, pero es todo lo que te podemos decir— dijo Zoro, ya en la entrada y abriendo la puerta.

—¿Y si no se presenta?

—Pues dudo que eso pase, pero en ese caso tú tendrás que hacer que se presente— contestó el peli verde.

—Si eso llega a pasar entonces nosotros tal vez podamos ayudarte, pero por ahora intenta esperar el momento adecuado— dijo Sanji una vez que ya estaban todos fuera, comenzaron a caminar rumbo a la casa de Law.

—Bien— contestó Luffy, aunque no había quedado muy convencido, esperaba que ese “momento adecuado” se presentara pronto, porque de todas maneras no podría seguir guardando lo que sentía por mucho tiempo, menos ahora que había decidido confesarlo.

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—Estoy listo, Law-niichan— dijo el castaño cuando llegó al final de la escalera.

—Bien entonces…— su voz se vio interrumpida por unos pequeños golpes en la puerta.

Se dio la vuelta con intención de atender al llamado, no sin antes mirar de reojo cómo Chopper se escondía detrás de la pared que lleva a la sala, suspiró y se dirigió a la puerta. “Espero que no sea Luffy-ya” que no lo mal interpreten, no es que no quisiera ver a Luffy, al contrario, estaba ansioso porque así fuera, pero si era el primero en llegar Chopper no se separaría de su lado, y adiós a toda posibilidad de interactuar con los demás.

Para su buena suerte, las primeras en llegar fueron las dos chicas del grupo, quienes le dedicaron una sonrisa cuando les abrió la puerta.

—Nami-ya, Nico-ya, pasen— dijo dando espacio para que pudieran entrar.

—Gracias, Law, ¿los demás no han llegado aún?— preguntó la peli naranja.

—No, ustedes son las primeras— respondió después de cerrar la puerta.

—Lo supuse, sólo espero que no lleguen tarde— replicó Nami.

—Ara— dijo la pelinegra al percatarse del chico que se escondía detrás de la pared, o al menos parecía que eso intentaba. —Tú debes ser el hermano de Trafalgar-san.

Historia de tres hermanosDonde viven las historias. Descúbrelo ahora