BLOOD | Finn Wolfhard×You

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-¿Entonces ya no son amigas? -preguntó Finn cuando recién terminé de contarle lo que sucedió con Sophia durante el receso.

Estábamos en su habitación, además de nosotros también estaban sus padres, Nick había salido con sus amigos y llegaría un poco más tarde.
Eric y Mary me recibieron muy bien, especialmente Eric. Su actitud conmigo fue todo lo contrario a lo que fue la primera vez que lo conocí.
Me quedaría a comer con ellos, era un poco temprano y llegaría a tiempo a casa, antes de que mis padres vuelvan.

-Todo parece indicar eso -contesté sin ánimos. Me recosté en su cama, había estado llorando varias veces durante pequeños ratos.

Finn se acercó a mí y me abrazo mientras me pegaba a su pecho. Lo peor de esto era recordar la verdadera razón por la cual estoy aquí en su casa y también el porque casualmente sus padres me invitaron a comer.
Pero aunque se me hacía una gran locura lo que Finn y su familia me pedían, en realidad lo estaba considerando.

¿Por qué? Fácil, me estaba quedando sola, la única persona que ha seguido conmigo a pesar de todo ha sido Finn, mi familia se está distanciado de mi cada vez más, Sophia me echo de su vida al igual que lo hizo Jaeden, ¿Quién más? ¡Ah, si! También Jack aunque en realidad todo haya sido por causa suya. Probablemente Wyatt también se aleje luego de darse cuenta que todo lo que le dije fue una mentira.
Me estaba quedando sola, no tenía nada que perder más que a mí misma, probablemente ellos debían alejarse de mi, lo hicieron por su bien y porque merecen vivir a salvo, sin preocuparse y sin tener a alguien como amiga que arruinen su vida.

-¿Has pensado lo que te dije en la escuela? -pregunta tratando de oirse muy casual, como si no tuviera otra alternativa y fuera el único tema del cual podríamos hablar.

Suspire y me separé de él. Volví a sentarme, cruce mis piernas y lo miré.
-La verdad si, lo he estado considerando bastante... -me miró emocionado, esperando a que fuera a decirle mi decisión- Te lo diré en unos momentos, primero quiero hablar con tus padres, ¿De acuerdo?

Wolfhard sonrió asintiendo. Se puso de pie y abrió la puerta de su habitación.
-Iré a ver si ya está lista la comida -anunció y bajo a la cocina.

Me quedé mirando a mi alrededor toda su habitación. Estaba un poco más ordenado que la última vez que entre aquí. Observe un mueble un tanto largo. En este habían CD's de distintas bandas, eran bastantes. También había algunos vinilos.

Era curioso, nunca me había detenido a ver con calma su habitación y ni había notado tantas cosas que tenía aquí dentro, tantas cosas que me hablaban de él.
No sabía que le gustaba tanto la música, incluso más que a mí. Jamás me imagine que tocará, habían distintas guitarras aquí dentro, tal vez unas dos o tres eléctricas y una acústica bastantes lindas y bien cuidadas.
En un estante también tenía apiladas muchas películas, había una cámara profesional y posters de un videojuego, una serie y una banda.

Regresó a la habitación y se paró a un lado de mi.
-No sabía que tocabas la guitarra -señale los instrumentos.

Soltó una risa y se acercó a la esquina donde se encuentran las guitarras. Tomó la acústica y regresó conmigo.
-Es como mi talento secreto -se sentó en la esquina de su cama, posicionó bien la guitarra sobre sus piernas-. Práctico todos los días. Ven -hizo espacio y dio unos golpecitos a un lado de él, indicándome sentarme junto a él.

Me senté, observando como ajustaba las cuerdas y probaba la guitarra.
-¿Desde hace cuanto prácticas? -le pregunté prestándole mucha atención.

Levantó los hombros e hizo una mueca con los labios.
-Tal vez diez años, lo he practicado desde muy chico -dejo de mover sus manos y una sonrisa tierna iluminó su rostro, como si se hubiese acordado de algo- ¿Sabes? Uno de mis sueños siempre fue tener una banda, y estuve a punto de tenerla pero...