Está bien... Maria José viene a dormir a mi casa, ¡Es genial! Ella llevará poca ropa... ella estará en mi cama... posiblemente vamos a dormir en cucharita... todo está bien. ¡Joder! Estoy bromeando y me estoy volviendo loca. Urgh.
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Pau me dijo que Poché estaría llegando aproximadamente a las 7pm, eran las 5:00 pm y aquí estaba yo. Corriendo alrededor de mi casa, lavando, limpiando y organizando. Tratando de que todo quedara con el mejor aspecto posible.
Después de unos minutos deje la sala y subí corriendo a mi habitación para asegurarme de que nada vergonzoso quedará a la vista. Mis bragas por ejemplo.... Finalmente recogí todas las cosas de mi habitación, tendí mi cama con las sábanas limpias y di un ultimo vistazo. Perfecto, todo en su lugar.... Era justo ya para mí, había hecho un montón de cosas y estaba realmente cansada.... Miré el reloj...... las 6:30. ¡Mierda! Maria José llegaría prono.
En los últimos treinta minutos me las arreglé para quitarme el sudor de todo el trabajo. Tuve un récord de cinco minutos en la ducha. Salí rápidamente de la ducha, seque mi cabello, me vestí, me aplique el maquillaje y me rocié con perfume. Entonces... sonó el timbre. ¡Mierda!
Corrí escaleras abajo evitando escalones para llegar lo más rápido posible a la puerta, pero debido a que tenía los pies mojados por la ducha, me resbalé y fui a dar contra la puerta de mi casa. Obtuve un gran golpe en mi frente, gemí de dolor y sostuve mi cabeza, seguramente iba a ser un golpe masivo cuando viera a la atractiva Señorita que me esperaba afuera de mi casa....
Podía escuchar la risita de Maria José desde afuera entonces abrí la puerta y entre de nuevo hacia la sala de estar, todavía frotándome la cabeza.
-¿Qué hiciste?- Poché se rió entre dientes al pasar el umbral, cerró la puerta y giró la llave.
Me giré hacia ella e hice un puchero triste que sólo la hizo reír más. Dejó caer su maleta al lado de las escaleras y se acercó a mí con esa estúpida sonrisa aún en su rostro. Entonces me acarició la cara y miró mi frente que estaba plenamente roja por le golpe que me había dado.
-Chica tonta, ¿qué voy a hacer contigo? ¿eh?- Dijo besando mi chichón. Me estremecí y sentí el aleteo de mil mariposas dentro de mí... y el dolor del chichón se esfumó en un instante.- Vamos.... - Sonrió, arrastrándome hasta el sofá.- Vamos Dani siéntate que te puedes marear.
Una vez me senté, se quedó de pie frente a mí.
-¿Quieres hielo?
-No. Estoy bien, Gracias Poché.- Le respondí, y acaricié el lado del sofá para que se sentara conmigo. Sonrió y lo hizo. Una vez que nos sentamos, hubo un ligero silencio incómodo... ahora entiendo lo que Pau dijo de no saber lo suficiente una de la otra.
Afortunadamente Poché rompió el silencio.
-Por lo tanto, Pau ¿eh? Ella es agradable.- Sonrió y puso su mano en mi rodilla.
-Lo es.- Contesté. Valientemente me arrastre más cerca de ella y puse mi brazo alrededor de sus hombros. Le dedique una sonrisa y apoyo se cabeza en mis hombros.
-Yah, para con el cliché de los movimientos ¿quieres?- Se rió entre dientes.
-¿Te estás quejando?- Pregunté, levantando una ceja. Poché se echó a reír, pero negó, acercándose más a mí. Dios esto era bueno, el hormigueo en cada una de las células de mi cuerpo confirmó mis sentimientos por esta mujer. Cada vez que me tocaba sentía desfallecer.-¿ Puedo preguntarte algo?
-Claro.
-¿Por qué le dijiste a Pau todo acerca de tu vida. Cuando ni siquiera has tenido una conversación completa con ella antes?
Maria José sonrió.- Me recuerda a mi hermanita. Sus personalidades son muy similares, peor no puedo decirle a mi hermana todo eso... Pau me tranquilizó con sus palabras.... No sé cómo ni por qué, pero me permitió confiar en ella en corto tiempo. Creo que si yo hubiera guardado cualquier otra cosa dentro de mí, ya habría estallado. Ella es una buena chica.
Odio tener que admitir que estaba un poco celosa de oírla hablando de Pau de esa manera, además de cómo se abrió a ella, pero yo respetaba su decisión. Vi a Maria José contraerse un poco, tal vez incómoda, así que cambié de tema.
-¿Tienes hambre?
-Hmm, no realmente. Almorcé tarde, supongo que tengo un pequeño apetito.
-Bueno, yo compré un montón de comida chatarra mientras vemos nuestra película...
Sonrió de esa manera que me enloquece y dijo.- Perfecto.
Una vez que reuní las palomitas de maíz, papas fritas, dulces, refrescos, y todo lo que compré de la cocina, lo llevé a la sala de estar y me deshice de todas las maletas de Maria José. Quería ayudarme pero no se lo permití, tenía una expresión molesta pero para mí era lo más lindo y tierno de este mundo hasta que de repente me acordé de algo.
-¡Mierda!¡Tú coche!
-¿Qué? ¿Qué le pasa a mi coche?- Preguntó confundida y alarmada por mi voz.
-Pau me dijo que aparcaras en el garaje por si acaso alguien lo ve.
-Está en la carretera pero de todos modos voy a traerlo, abre tu garaje por favor.- Una vez que regresó, nos relajamos otra vez y nos sentamos frente al televisor.- ¿No íbamos a ver una película?- Preguntó.
-Bueno es que mi reproductor de DVD está en mi... habitación.- No hubo reacción de ella.- Y siempre es el lugar dónde veo.... Las películas....
-Está bien....- Soltó una risita.
-Ohmmm, y no hay un sofá en mi habitación...- Me sonrojé y puse mis manos en mis mejillas, inmediatamente soltó una carcajada ante mi evidente incomodidad.
-Sí....- Oh quería avergonzarme.
-Así que.... ¿deberíamos ir?
-Si no hay un sofá en tu habitación ¿dónde vamos a ver la película?
-Um...mi uh. Tendrías que estar en mi...
-¿En tu cama?- Eso sonó un poco seductor, ¿o es mi imaginación? Asentí y Poché se rió de nuevo.
Yo estaba un poco nerviosa por ver su reacción a mi habitación... ¿y si no le gustaba?
Entramos y puse la comida en mi cama. Encendí el televisor, el DVD e inserte la película que compré. Se llamaba 'El conjuro'.
Por el rabillo del ojo vi a Maria José mirando algunas de las foros que tenía en la pared, las medalla de gimnasia de cuando tenía 4 años. Se giró y puso su atención en mí.
-Wow. Esta la quería ver.- Dijo cuando vio la cubierta de la película.-¿Te gustan las películas de horror?
Asentí. Odiaba las películas de terror, me aterran. La última que vi fue 'Chucky' y después de eso tuve que tirar todas mis muñecas al ático donde ninguno de ellos pudiera buscarme.
Contuve la respiración, y agarré el control remoto del DVD, me dirigí a mi cama y subí apoyándome contra la cubierta.
Maria José se acercó a la cama y se acotó a mi lado, pero todavía había casi un milla de distancia entre nosotras. La miré y estaba un poco más cómoda. Cuando lo hizo, apagué la luz y presioné play.
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Ya tiene este capítulo, espero que les haya gustado, el próximo será el siguiente fin de semana. No se olviden de votar y comentar.
Nos leemos,
-Al.
