La Hermana Del Cuatro Ojos

especial

Estabas en el cuarto junto a Akiko y algunas amigas más.

Hoy era el día de tu boda y te estaban ayudando con el vestido y maquillaje.

- ¿De verdad son necesarios los tacones?- preguntaste viendo lo que te tendia tu amiga.

-Obvio ¿Acaso quieres casarte en zapatillas?- te la quedaste mirando- Ni se te ocurra responder.

-Vamos (t/n) es solo un dia- te dijo Akiko dándote aquellos armas mortíferas.

-Me voy a matar- dijiste poniéndoselos y levantándote- Ostia...creo que ahora soy igual de alta que Tobio.

-Que exagerada- rieron las chicas.

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-Siento que me ahorcan- dijo el chico molesto.

-Vamos kageyama, por ir arreglado un día no vas a morirme- dijo el pelinaranja ya arto.

- Hinata tiene razón kageyama, después de todo estamos hablando de tu boda- dijo suga volviendo a colocarse la bien.

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-Alejate de mi, mujer- dijiste viendo cómo traían un montón de maquillaje.

-Vamos (t/n), aunque tengas buena piel aún hay inperfeccciones- después de mucho forcejeo acabaron logrando que te sentaras.

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-Tienes que ser una BROMA- dijo el chico viendo como su amigo cojia laca y un peine.

-No, ni creas que vamos a dejar que te cases con eso pelos- agarraron al chico de los hombros y lo sentaron en la silla- tu tranquilo.

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-Es como jugar con muñecas- dijo Akiko peinándote.

-Que te jodan- dijiste ya harta de tantos arreglos- ¿Por qué tengo que ir así?

- Bueno ¿y como quieres ir?- te preguntaron.

-No lo se...pero esto me parece demasiado- te miraste en el espejo.

Llevabas un vestido de lo más exajerado para tu gusto

(En blanco)

- No digas tonterias, te ves preciosa- te dijo Akiko viéndote de arriba abajo.

-Gracias Akiko- la abrazaste.

-Bueno, esto está a punto de empezar así que nosotras nos vamos- abrazaste a las demás y te dejaron a solas en el cuarto.

-Toc, Toc- dijo tu suegro abriendo la puerta- ¿Esta lista my lady?- dijo tendiendote el brazo.

-Eso creo...- te agarrate a él.

-Estas preciosa- te dijo dándote un beso en la cabeza.

-Gracias Kags- estabas nerviosa, sentías tus piernas débiles y tu pulso muy fuerte.