capítulo 50

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El despertador os despertó a ambos.

- Venga para arriba- te dijo el chico saliendo de la cama.

-Noooooooo...solo 5 minutos- dijiste agarrándolo de la muñeca.

-Nunca son solo 5, levántate- te negaste- bien- el pelinegro te agarró como a princesa causando tu sorpresa.
(No seré yo un rapero de esos)

- Oye ¿Pero que haces?- dijiste bajando.

- Y ya estaria- dijo entrando en el baño.

Rodaste los ojos y te fuiste a la cocina a hacer el desayuno.

Cuando kageyama salió de la ducha tú ya habías terminado de preparar el desayuno.

-¿Y que tienes pensado hacer?- te pregunto metiéndose la tostada en la boca.

-Pues lo primero será las cosas de la casa y también faltan algunas cosas en la despensa  así que iré un momento al súper- dijiste dando vueltas a tu café.

- Bien pero tampoco te sobre esfuerces.

-No lo haré mamá- te dio una patada por debajo de la mesa- Au.

-Me voy- dijo poniéndose las zapatillas, te dio un beso en los labios- hasta luego.

-Ve con cuidado- dijiste al verle marchar.

Cojiste tus cascos y pusiste música.

Lavaste los platos, sacaste el lavavajillas, pasaste la aspiradora y la fregona por toda la casa y limpiaste los cristales.

Cuándo escuchabas música eras capaz de pasarte limpiando todo el día.

Una vez terminaste te duchaste y te preparaste para salir a comprar.

Cogiste las llaves de la casa y saliste hacia el supermercado.

Entraste dentro y agarraste una cesta.

- Huevos, huevos, huevos...- decías por lo bajo buscando el alimento- Ostia...

Chocaste contra alguien.

-Perdona no estaba prestando atención- te disculpaste, alzaste la mirada para ver a la persona- tu...

- ¿Que haces aquí (t/n)-chan?- era aquel molesto armador- No me digas que te estás saltando las clases...

- Y a ti que coño te importa- seguiste tu camino.

-Tan fría como siempre- te siguió.

Seguías haciendo la compra con la incómoda sensación de tener a aquel chico detrás.

-Ya deja de seguirme- dijiste harta.

- En cuánto respondas mi pregunta.

- Si, me estoy saltando las clases para hacer la compra...¿No te parece cosa de gamberros?- dijiste sarcásticamente.

- Eres una mujer difícil- se quejó el chico- ¿Quién sería capaz de aguantar salir contigo?

-Yo me preguntó exactamente lo mismo- te acercaste a la caja y pagaste tú compra- Nos vemos Tontokawa- dijiste antes de salir de la tienda.

El chico te miro molesto y pago su compra.

Caminabas tranquila...o al menos hasta que volviste a notar aquella presencia.

-Ya deja de seguirme- dijiste dándote la vuelta.

-No te sigo, necesito ir por aquí- dijo sacandote la lengua ¿Acaso tiene 4 años?

Seguiste tu camino hasta la casa de tu pareja, sacaste las llaves pero antes de poder entrar el chico te vivió a llamar.

- ¿Por qué entras en la casa de Tobio-chan?- pregunto sorprendido- no me digas que...

La Hermana Del Cuatro OjosDonde viven las historias. Descúbrelo ahora