°•Andrey•°

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Antes de entrar a la casa, pensé en cómo decir que no había logrado sacar diez en el examen, quiero tener las mejores notas y esto no ayuda en nada.

- Cielo- me giré y vi a mamá acercarse- ¿Que haces aquí? ¿Por qué no entras?- puso sus manos en mis mejillas.

- Esque, estaba pensando- ella sonrió.

- Como siempre, ¿ahora por qué?- empezamos a caminar a la casa.

- ¿Donde está papá?- pregunté antes de decir algo.

- Con tu tío Evan, creo que están en el sótano, ¿tienes hambre?

- Mamá, no saqué diez en cálculo- dije preocupado- la maestra me puso nueve punto nueve- ella suspiró y sonrió de nuevo, algo que me encanta es verla sonreír, me da paz.

- Cariño, esa nota está genial, no tienes nada de que preocuparte, eres un excelente alumno, jamás nos has decepcionado.

- Pero papá...

- ¿Que pasa conmigo?- apreté la hoja en mi pecho y no deje de mirar a mi madre- Hey, ¿cuando llegaste?- lo miré- ¿Que tal te fue?

- Papá... Intente sacar diez, te lo juro- le di el examen y apreté la mano de mamá- no te enfades.

- No entiendo porque piensas que me voy a enfadar hijo, esta calificación- me enseño el examen- es de las mejores, me siento orgulloso de ti- se acercó- no importa que no sea un diez, lo haces muy bien en el instituto- sonrió.

- Y por esa razón, te tenemos un regalo- dijo mamá tomando una bolsa del sofá- te lo mereces mi vida- la tome y ella abrazo a papá.

- ¿Que es?- sonreí.

- Míralo tú mismo- dijo papá, me senté en las escaleras, saqué la caja de un celular, el último Iphone.

- ¡¿En serio que es para mi?!- ambos asintieron, mi celular ya estaba verdaderamente roto, pero la navidad pasada preferí un libro de astronomía a un celular.

- Sigue que hay más- lo deje a un lado y saque el reloj de Apple y los audífonos- Me canse de verte con el mismo reloj de siempre, parece que no lo quieres soltar nunca, tienes una colección entera y siempre usas el mismo- no dije nada sino que los abracé.

- Muchas gracias de verdad, no se como agradecer todo esto.

- Sigue siendo así de estudioso y buen hijo que con eso nos sentimos más que satisfechos- dijo mamá- ahora ve y descansa, tenemos cena con Dan.

- ¿Que?- pregunto papá confuso.

- Amor... La cena de tu padre, quiere comunicar algo importante recuerdalo.

- ¡Ah! Vale, ¿Isaac vendrá?

- No, la universidad lo tiene bastante ocupado- los deje solos con sus charlas, subí a mi habitación, me senté en el escritorio y pasé la memoria al nuevo celular.

Mientras configuraba todo lo del celular, me entró una videollamada por el portátil, era André, conteste y él apareció en la pantalla sin camisa.

- Te estuve llamando, ¿qué tanto haces?- me preguntó y yo le enseñé el nuevo celular- Anda ya... ¿De verdad?- se acerco a la cámara.

- Sí, por eso no te pude responder, aún estoy configurado el celular, es un premio por buenas notas.

- Te lo mereces- sonrió- en cambio a mi, papá me tiene con sentencia, ya se enteró de mi gran comportamiento en el instituto, se puso realmente furioso, me dio miedo.

- Creo que es a la única persona que le temes- dije y él asintió- Trata de mejorar en el instituto, solo así lograrás cambiar la relación con tu padre.

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