Fairy Saint (Fairy Tail Y Saint Seiya LC)

Cap. 36: Sigue adelante

Con el corazón latiendo con rapidez, la maga pelirosa seguía al antes nombrado Demonio de la isla Kanon.... el hombre le había querido asustar con su presencia, pero la chica no había logrado mostrarle alguna señal de miedo al hombre de cabellos largos y azulados....
Caminando con tranquilidad, el demonio comenzó a dirigirse más al interior del volcán, llevando así a la joven a una zona cubierta de lava.... en medio de la lava, sentado sobre una roca... el caballero de Libra se encontraba presente, inconsciente sin hacer movimiento alguno....

Deuteros: vamos, levántate.... *dijo el mientras levantaba la voz y caminaba hacia el* es hora de que despiertes y regreses al campo de batalla.

Mientras, la maga comenzó a dirigirse hacia un espacio seco y sin problema que se encontraba en el volcán.... con un gesto de preocupación, posó sobre el rostro del mago de cabellos azulados su mano cálida, el hombre se encontraba recostado en una enorme roca, sin su capa y camisa, mostrando con claridad un vendaje que cubría la herida en su pecho.... hecha por el mismo Hades antes de su partida del castillo.

Mientras lo miraba, pudo volver a recordar aquel amargo y triste momento.... cuando vio primero como el caballero de Libra había sido atacado por la espada de Hades, mientras que este con su mismo poder hizo retroceder ambos magos de forma que los había hecho estrellarse contra una de las paredes del castillo que lentamente comenzaba a caerse, el ataque de Jellal no había sido suficiente para acabar con el Dios del inframundo. Después de dejar caer el cuerpo de Libra en el suelo, miró a ambos magos y aunque su próximo ataque estaba dirigido para acabar con la vida de ambos, Jellal había logrado cubrir a Meredy de tal catastrófico ataque, haciendo creer al Dios que ambos habían caído sin vida al suelo.... pero, hacer eso solo ocasionó que el fuera quien recibiera el ataque de Hades, cayendo en el mismo sueño profundo en el cual una vez Sisyphus había caído y que ahora Dokho y el se encontraban ahora.

De repente, el sonido metálico de la armadura de Libra la sacó de los pensamientos de culpa y tristeza, girandose a ver a Deuteros, se sorprendió mucho al ver cómo el hombre había detenido a manos desnudas las armas de la armadura de Libra.

Deuteros: no puedes seguir confiando en tu armadura para protegerte.... *dijo el mientras miraba con una divertida sonrisa al caballero* no lo crees así? Dokho de Libra.
Meredy: Deuteros!! Estas bien?! *preguntó preocupada mientras lo miraba*
Deuteros: je.... *hace de lado las armas, tirandolas en la lava* preocúpate más por tu vida y la de tu compañero durmiente.
Meredy: se llama Jellal *dijo corrigiendo el comentario del demonio*
Deuteros: como sea *dijo el para después mirar en silencio la herida de Dokho con precisión y detalle... sin mirarla solo dijo* su herida, fue también hecha por la espada de Hades, no es así?
Meredy: si... *contestó de forma rápida mientras lo miraba* ¿sabes cómo despertarlos?
Deuteros: es una suposición que estoy seguro funcionara *dijo el mientras comenzaba a sacar un frasco con un contenido dentro de este* si algo maldito es lo que los tiene en esta situación, lo mejor sería usar esto.
Meredy: que cosa es.... *iba a preguntar, esto hasta que lo miro acercarse a la chica y por obvias razones también a Jellal, un poco nerviosa, tomó a Jellal en forma de protección* ¿Que piensas hacer con eso? Aún no me haz dicho lo que es....
Deuteros: esto es algo de lo cual no es necesario que llegues a saber, así que quítate *dijo el mientras le mostraba el frasco* tu amigo será el conejillo de indias que probara si funcionara....

Molesta y a la defensiva, Meredy hizo aparecer con su magia una hoja afilada, apuntando y tocando el mentón del caballero de Geminis.... dándole la advertencia de que si se acercaba un poco más, lo atacaría.... Deuteros simplemente comenzó a reirse de su actuar.

Meredy: de que tanto te ríes? *preguntó molesta* acaso esto te parece divertido? Ni creas que te dejaré matarlo.
Deuteros: si hubiera querido matarlo *contestó el mientras paraba de reírse y tomara con una de sus manos el filo de la hoja casi invisible, mirando a la chica con una sonrisa tenebrosa* ya lo hubiera hecho desde el primer momento en que habían pisado la isla.