(¿Hate?) Love [Catradora]

Capítulo 5.0

Adora se levantó. Primer día que el lado derecho de su cama se vio vacío y frío. Suspiró y se asomó a la habitación de su hija, despertándola para que vaya al colegio.

—Sweet Bee, levántate. Debes darte una ducha y desayunar—. Dicho esto, la menor elevó su cabeza, asintiendo hacia su madre aún con los ojos cerrados.

Fue al baño a asearse, lavando su rostro, dientes y cambiándose el pijama. Levantó su cabello en una coleta, como solía hacerlo hace mucho tiempo atrás.

Bajó y comenzó a preparar el desayuno, escuchando el agua correr en el piso de arriba. Tardó tan solo unos minutos, a lo que preparó la mesa, algo decaída de que sean dos platos en lugar de tres.

Melsy bajó a desayunar junto a su madre, mirando la televisión.

—Ma, ¿tenemos canales internacionales?

—Sí, hija. ¿Por qué?—. Mesly comenzó a buscar un canal, entrando a "Sports News". Frenó el control y tomó otro bocado, mirando la pantalla. A los minutos, recibieron una noticia importante.

"Acabamos de recibir la noticia de que se encuentra, ahora mismo en el aeropuerto, la boxeadora del club Crimson Waste, Catra, la garra filosa".

Adora no pudo evitar desequilibrar los platos de sus manos, rompiendo uno al escuchar la televisión. Dejó los restos de los vidrios en el suelo, para acercarse al sillón de la sala y ver la pantalla con más curiosidad. Bee notó esto, rodando los ojos, y se levantó y barrió los vidrios del suelo. Una vez terminó, volvió a sentarse para terminar su desayuno, viendo como su madre no se había inmutado.

"Aquí se encuentra la señorita Catra. ¿Alguna opinión sobre las clasificaciones de Londres?¿Planea volver al ring?". Conociendo a su madre y a su esposa, las rubias rieron, sabiendo que la morena que aparecía en pantalla contestaría con sarcasmo.

"¿Para qué otra cosa habría vuelto aquí, señor? Me disculpo por no poder responder, pero me encuentro cansada. Pueden entrevistarme antes de la primera pelea, si gustan". Dicho esto, la morena se dirigió hacia Huntara, quién tomó su bolso y la dirigió hacia el auto de su padre, yendo directo al club.

Adora pareció volver a la realidad en el momento en que el nombre de Catra desapareció de la pantalla, a lo que la menor escondió una risa. Comenzó a pensar en lo tierno que era que sus madres se amaran con tanta profundidad, deseando una relación como aquella en su vida.

Se levantó una vez terminó el plato y lo dejó en el lavaplatos junto a su vaso y cubiertos, tomando su mochila.

—¿Te llevo?

—No, está bien. Caminaré con Nahomi—. Se acercó a su mamá y le plantó un beso en la mejilla—. ¡Nos vemos luego, ma!—. Dicho esto, Adora se asomó a la ventana, viendo como una niña vestida de estilo gótico y cabello celeste, saludaba con entusiasmo a su hija, para ambas comenzar el camino hacia el colegio. Sonrió nostálgica, recordando las largas caminatas que ella y la morena solían hacer durante el día.

Hizo muchas cosas el segundo día sin su pareja en casa. 

Limpió a profundidad su cocina, baños y habitaciones, sin tocar mucho las cosas del cuarto de su hija para respetar privacidad. Revisó viejas cajas guardadas en su ático, tirando lo innecesario y acomodando algunas fotos y libros en la sala. Limpió su jardín trasero, quitando las malas hierbas y regando las plantas mientras Swift Wind la miraba parado a su lado, siguiendo su paso durante todo el trayecto.

Una vez terminó, se dirigió escaleras arriba a darse una ducha, notando que tenía algunos raspones nuevos en sus pantorrillas. Los ignoró, no dolían en absoluto.