La Ceni(Xayah)cienta

Un designio inesperado

Ya una vez de pie, Yaxah dobló la "manta" y la colocó sobre la esponjosa nube que le había servido de lecho.

-¿Qué es este lugar? ¿Porqué estamos aquí?

-Bueno, pudiéramos decir que éste es un cuarto de descanso para los aspectos. Y... luce así porque era el turno de Zoe para decorarlo,- le respondió Tarec, con una calmada naturalidad.

-De acuerdo, pero... ¿porqué estamos aquí?

Tarec la miró con un poco de lástima.

-Yaxah, ¿puedes recordar lo que pasó?

Ella analizó la pregunta.

-Cuando el brackern empezó a entonar ese cántico... emanó una luz... Y esa luz también apareció alrededor de la luna. Entonces, sentí... como si algo... quisiera detener mi corazón.

Raken lanzó un doloroso grito ahogado. Y antes de que ella pudiera decir algo más, él la tomó de los hombros.

-¡Lo sabía! ¡Sabía que te sentías mal, pero jamás creí que...!

-¡Raken...!

Pero él la abrazó fuertemente, al tiempo que ponía su cabeza sobre la de ella.

Algo sorprendida, Yaxah le devolvió el abrazo.

-¡Estoy bien, mieli...!

Sin embargo, Raken no la soltó. En lugar de éso, la abrazó aún más fuerte.

Mientras se abrazaban, los recuerdos de Yaxah se hacían más nítidos. Era verdad; cuando sintió ese dolor en su pecho, perdió el equilibrio.

 Pero ante de caer, Raken la sostuvo y la cargó. Tras eso, se la llevó detrás de un cobertizo que estaba por ahí y entonces, invocó su "cálamo reluciente". Eso la hizo sentir un poco mejor, pero sólo por un momento. 

-Tú te diste cuenta... de que mi alivio fue sólo temporal. Seguiste invocando tu poder, luego, ya no recuerdo más... Oh, mieli... Has de haber acabado exhausto por mi culpa.

Yaxah posó su frente sobre el pecho de su compañero.

-No, no...yo estoy bien; si tú estás bien, yo estoy bien.

Conmovido por esas muestra de afecto tan real, a Tarec se le pusieron los ojos brillosos, y puso sus manos sobre su ancha clavícula.

-¡Ohhh! amor y belleza puros... ustedes juntos... ¡son tan hermosos...!

Yaxah "reaccionó" y miró al aspecto, alzando una ceja. Todo le resultaba demasiado... surrealista. Finalmente, le dio unas palmadas en la espalda a Raken. 

Él notó que a ella le apenaba un poco que los vieran  dándose cariños, así que sonrió y finalizaron el abrazo.

-Y... puedo intuir que, de alguna manera nos viste y nos trajiste aquí.

Tarec asintió.

-Sí, los transporté a mi plano.

Yaxah miró a Raken, alzando una ceja.

Él se dobló un poco y comenzó a rascarse la cabeza. Parecía que no sabía cómo explicarle.

-Yo estaba muy shockeado, ¿sí? Pero luego te vi. Quiero decir... Tu cuerpo se veía más relajado. Y tu cara volvía a verse normal... te regresó el color a tus labios y mejillas y ya respirabas bien. Entonces, me di cuenta de que te habías quedado dormida.

-¿Porqué no me despertaste?- preguntó Yaxah, enérgica.

-Después de lo que te pasó... supe que tenías que descansar, amor.

-Pero, ¡Nexus!

-Nexus puede esperar...- dijo Raken con seriedad.

-¡Ejem!

La pareja de vastayas dio un respingo.

-Verás,-prosiguió Tarec. -El brackern estaba deteniendo a la luna con una magia  ancestral. Y al ser la elegida de la luna, tu cuerpo "resintió" ese hechizo. Para evitar una desgracia, tenía que alejarte de ese plano. Por eso los traje al nuestro.

-Algo sí como... ¿un daño colateral mágico?- inquirió Yaxah.

-Sí, algo así. Una vez que Raken te acomodó para que descansaras, yo me presenté y le hice saber algo muy importante al respecto, ¿verdad, Raken?

Raken miró a Tarec un tanto confundido. Pero luego, golpeó uno de sus puños contra la palma de su mano contraria y sonrió, eufórico.

-¡Ah, sí! Y son buenas noticias ¡El brackern no atacará a a Nexus! 

Yaxah frunció el ceño.

-No atacará... ¿absolutamente a nadie?

-¡No, cariño! Bueno... sólo tomó a la madre de Sitt, pero no le hizo daño, sólo la puso a dormir y se la llevó con él  :)

Yaxah miró a Raken, para luego voltear a ver a Tarec.

-¿Qué?

Tarec asintió, al tiempo que se acercaba a la pareja y los abrazaba.

-¡Sí... Fue un poco difícil, pero durante su trayecto a Nexus, logré hablar con él! ¡Las vidas de los nexianos ajenos al asunto del cristal, están a salvo!

Mientras estrechaba a Raken con su brazo izquierdo y a Yaxah con el derecho, comenzó a darles vueltas.

Raken sonrió como un niño, mientras que Yaxah lo miraba, desconcertada.

-¿Y la señora Cralia? 

Tarec dejó de dar vueltas en el acto.

-Ah, sí... Bueno, la cosa es... que ella fue otro daño colateral. Ocurrió algo que no formaba parte del trato y... Ahí sí no puedo meter mano. Lo siento.

Yaxah se zafó del abrazo y gritó:

-¡¿QUÉ CLASE DE ASPECTO ERES?!