El baile y tú mi pasión.

capitulo 17

Camine y camine ignorando la voz de Mike.

-Elle!!! espera!- gritó

Camine más rápido aún. Cuándo sentí sus pasos cerca de mi, saqué las llaves de mi auto lista para huir.

-Elle, lo siento.- Tomó mi brazo con fuerza y me giró para que lo mirara.

Mis ojos ardían y me sentía como una idiota...yo no hago ese tipo de cosas y con él me atreví. Me siento humillada. Su mirada encontró la mía y sus ojos se abrieron cuando notaron que una lagrima se deslizaba por mi mejilla. Me solté de su agarre bruscamente y me subí a mi auto arrancando el motor y dejando a Mike atrás. No me gustaba sentirme triste, no lo hacia desde que mis padres se divorciaron, desde entonces trataba de olvidar ese sentimiento a toda costa. 

No quería que nadie me viera de esta manera, pero tenia que desahogarme.

Luego de varios minutos manejando sin rumbo me estacione fuera de la casa de Mia y la llame a su celular para que bajara.

-Elle, Estas bien?- pregunto Mia preocupada al ver mis ojos hinchados.

Saqué una pequeña sonrisa y asentí pero mis ojos no tardaron en inundarse en lagrimas.

-Hay no amiga, Elle no llores, que sucedió??- pregunto mientra me escondía en un abrazo.

De mi garganta se escapo un sollozo lo que hizo que Mia apretara más su abrazo.

-Lo siento , la verdad es que no es nada, es algo muy estúpido y creo que exagero.- Dije tratando de reír.

-Vamos Elle, te conozco y se que debió haber sido algo que de verdad te haya herido, para que estés así. Fue Mike?- preguntó con el ceño fruncido.

Mirando a la nada asentí.

-Ese bastardo!!! que te hizo?

Le conté lo que sucedió, a lo que en algunas partes reía y yo también un poco pero al final las lagrimas volvieron a aparecer.

-No dejare que ese imbécil se acerque a ti de nuevo, le diré a Joe que le de su merecido.- Dijo Mia acariciando mi cabello.

-Lo que más me dolió, fue que no le dio importancia y dijera que fue un error, siendo que yo nunca había llegado a ese nivel, con nadie.

-Lo sé cariño, es un imbécil que no piensa antes de hablar, no te preocupes, no dejare que te haga daño.

Le sonreí. Mia era una muy buena amiga pero se como protegerme sola. El escudo que tenía antes de conocer a Mike era mi protección, no hasta que llego él de una forma totalmente imprevista, pero esta vez no dejare que lo cruce y no seré otra chica más en su lista.

-Te puedo pedir un favor?- Le pregunte a Mia.

-Claro lo que sea.

-Puedes ir a casa e ir por algunas cosas, ya sabes, ropa, mi computador, cosas como para una semana. Iría yo pero sé que Mike estará esperando a que llegue y ahora no quiero verlo.

-Claro, te quieres quedar unos días conmigo?

-Gracias pero quiero alejarme un poco y además él sabrá que estoy aquí si me quedo. Te aseguro que no quiero verlo, me siento avergonzada y humillada y más si lo veo a la cara.

-Y a dónde irás?

Di un suspiro.- A la casa de mi padre.

-Pero Elle, es muy lejos, además tu sabes como es tu padre de sobre protector, no te dejara salir ni a la esquina de la casa.

Reí.-Lo sé, a lo mejor eso es lo que necesito.

-Bien espérame adentro, esta Joe, quédate con él mientras voy a tu casa. Quieres que le diga a tu madre?