Capitulo 65

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El gran día estaba aquí.

Nunca pensé estar en esta situación antes, y con un hombre tan fantástico como Mike, no puedo estar mas feliz en este momento,  y tan nerviosa que mi barriga se pone un poco dura, pero es normal.

El vestido se desliza a la perfección sobre mis curvas y ya estoy lista, con el cabello en alto hacia un lado y un maquillaje a la perfección. Mi madre no ha dejado de llorar desde que llegamos al hotel, y ya la perdí por completo cuando me pusieron el velo.

No me permitieron ver el lugar de la boda por ordenes de Mike, no se que tiene que le gusta ponerme más nerviosa de lo que ya estoy ahora.

Mia y las chicas revolotean de aquí para allá tratando de arreglar los problemas de los que yo no me puedo enterar y mi madre no deja de llorar a mi lado diciendo lo feliz que esta por mí. Su boda sera dentro de cinco meses, así que dejo todas sus planificaciones para ayudarme con la mía.

Todo hasta ahora marcha a la perfección y estoy agradecida por eso.

Tocan a la gran puerta blanca de la suit en la que estamos que esta bañada por la luz del sol, hoy es un día hermoso.

Mia abre la puerta y ahí esta mi padre con su traje planchado a la perfección y una caja de terciopelo en sus manos.

-Estas hermosa.-dijo cuando entró y me beso la frente.

-Gracias.

-Solo quería entregarte esto y decirte que no podría estar más orgulloso de ti.  

Tome la caja entre mis manos y al abrirla me encontré con unos hermosos aretes de esmeralda. Se veían muy finos y delicados.

-A tu abuela le hubiera encantado que los tuvieras hoy.

Mis ojos se llenan de lagrimas al recordar a la mujer que amaba el ballet, nadie como ella lo amaba más.

-Gracias.-sonreí.

-Todo esta listo, es hora.-dijo Mia en su hermoso vestido de dama de honor.

Asentí con el estomago revuelto y tome el brazo de papá.

-No me dejes caer.-susurre con voz temblorosa.

-Nunca...

La caminata que tuvimos, se me hizo extrañamente larga, papá me sostenía de la mano mientras un hombre nos guiaba al lugar donde tenia que esperar a que la música sonara para caminar altar.

Nos detuvimos frente a dos puertas blancas y no pude evitar pensar que detrás de ellas se encontraba el resto de mi vida, esperando a que cruzara la linea invisible que nos separaba por solo unos metros. Podía escuchar los murmullos de la gente al otro lado y eso me hacía temblar, pero luego recordaba que Mike debe estar peor con todos los ojos puestos en él y eso me hizo sentir un poco mejor. debe verse guapo con su traje.

Una melodía suave comenzó a oírse en todo el lugar y pude sentir un pequeño movimiento en mi barriga. Tomé el brazo de papá con fuerza y respire profundo antes de que abrieran las puertas y me dejaran ver a los invitados sentados en un hermoso prado verde en el que un hermoso camino hecho con pétalos de rosa blancos me guiaba aun gran árbol de aromos.

Comencé a caminar con todas las miradas en mí, incomodo, pero luego lo vi a él, su mirada tan aturdida y sorprendida que casi se me escapa una pequeña carcajada. Todo desapareció a mi alrededor y eramos solo nosotros, su mirada se encontró con la mía y una sonrisa se dibujo en nuestros labios. Se veía guapísimo en su traje azul y su camisa con puntitos era adorablemente sexy. Sus tatuajes a la vista como siempre, perfecto.

El baile y tú mi pasión.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora