Gabriel ingresó a la mansión, respiró hondo y se afirmó en la puerta.
—¿Qué carajo ha ocurrido? —Olfateó su piel entre la ropa. El olor de Charly seguía ahí, y estaba seguro de que no se iría pronto.
Le gustaba su aroma, su voz rota llegando al orgasmo y esa boca... De solo imaginarla alrededor de su pene era...
—¿Te ha pasado algo?
Giró su cabeza hacia su novia, que estaba parada en el pasillo que dividía la cocina del comedor y lo escrutaba con detenimiento.
—Nada que te incumba.
—¿Tienes el pelo mojado?
—¿Y?
Anyka frunció la boca, conteniendo la rabia y la impotencia de saber que Gabriel la engañaba sin restricciones.
—¿Por qué nada te importa? ¿Por qué no me valoras?
El rubio puso los ojos en blanco. Esta conversación permanente ya empezaba a aburrirlo.
—Si no te valoro como dices, ¿qué mierda haces conmigo?
La mujer llevó su mirada hacia el costado.
Gaby se acercó a ella y la tomó del mentón, haciendo que lo observara.
—Contesta cuando te hablo.
—Te amo, ¿eso es insuficiente para ti?
Gabriel la escaneó. El semblante angelical, su cabello en ondas, que caía con delicadeza sobre sus hombros, sus ojos soñadores, su boca fina y bien delineada. Mierda, ni siquiera se comparaba a la belleza de Carlos pese a que era muy hermosa.
—Lo nuestro nunca se trató de amor, y lo sabes.
—¿Y entonces?
—¿Cuánto llevamos juntos, Anyka?
—Tres años.
—Tes años, dos meses y dos días, los más largos de mi puta vida.
Los ojos grandes de su novia se abrieron con sorpresa. Era increíble la cuenta minuciosa que llevaba.
—¿Tanto te pesa esta relación?
—Es que no es una relación —aclaró Gabriel—. Tú estás conmigo por costumbre y soportas que te engañe y humille. Dime, ¿qué clase de amor esperas de mí?
—¿Algo de lo que entregaste alguna vez?
El ruso le dio una sonrisa amarga. Esta situación lo asqueaba. Era intolerable continuar a su lado, y las últimas horas le mostraban lo equivocado que esto era.
—Nunca voy a amarte. Creo que perdí esa capacidad hace años.
—Estás tan dañado, Gabriel —pronunció con dolor la mujer—. Alguna vez creí que esto podría...
ESTÁS LEYENDO
Mi secreto T.O Libro 2 (Gay +18)
RomanceTe odio... Charlie lo dijo mientras el aliento de ese hombre estaba sobre su cuello Te odio... Se lo repitió mientras embestía una y otra vez dentro de su ser y lo llenaba de sensaciones desconocidas y excitantes Todo en Gabriel Petrov era equivoca...