~ 37 ~

333 31 0
                                    

Maratón 1/?

Cuando vuelvo a mi cuarto, Lauren está sentada en mi cama como la persona desagradable que es.

Empiezo a imaginarme a mí misma cogiendo la lámpara y estampándosela en la cabeza, pero no tengo energías para pelearme con ella.

—No voy a disculparme —me dice cuando paso por delante de ella en dirección a la cama de Bella.

No pienso sentarme en mi cama mientras esté en ella.

—Ya lo sé —respondo, y me tumbo. No pienso ceder ante sus provocaciones y no espero que se disculpe. Ya la voy conociendo.

Aunque, vistos los últimos acontecimientos, creo que no la conozco en absoluto. Anoche pensé que sólo era una chica enfadada porque su padre la había abandonado, y que se aferraba a ese dolor usando la única emoción que conocía para mantener a la gente alejada.

Pero esta mañana he visto que en realidad es una persona horrible y detestable. Lauren no tiene un ápice de bondad. Si en algún momento pensé que sí, fue sólo porque ella me engañó para que lo pensara.

—Tenía que saberlo —dice.

Me muerdo el labio para intentar contener las lágrimas. Permanezco callada hasta que oigo que Lauren se levanta y se aproxima.

—Vete —le ruego, pero cuando levanto la vista, está de pie frente a mí.

Cuando se sienta en la cama, me levanto.

—Tenía que saberlo —repite, y me hierve la sangre de rabia. Sé que sólo quiere provocarme.

—¿Por qué, Lauren? ¿Por qué tenía que saberlo? ¿Qué tiene de positivo hacerle daño? A ti no te afectaba lo más mínimo que él no lo supiera. Podrías haber pasado el día tranquilamente sin decírselo. No tenías ningún derecho a hacerle eso, ni a él ni a mí. —Siento que las lágrimas amenazan con aparecer de nuevo, pero esta vez no puedo detenerlas.

—Yo querría saberlo si fuera él —dice en tono frío.

—Pero tú no eres él, y nunca lo serás. He sido una estúpida por pensar que podrías llegar a ser algo parecido. Además, ¿desde cuándo te importa hacer lo correcto?

—No te atrevas a compararme con él —salta.
Detesto cuando decide responder sólo a una de mis frases, y que tergiverse mis palabras para provocarse a sí mismo. Se levanta y avanza hacia mí, pero yo retrocedo hacia el otro lado de la cama.

—No hay comparación. ¿Es que no lo entiendes? Tú eres una idiota cruel y desagradable que sólo piensa en sí misma, y él... él me quiere. Él está dispuesto a intentar perdonarme por mis errores. —Lo miro a los ojos— Mis horribles errores —añado.

Ella da un paso atrás como si la hubiese empujado.

—¿Perdonarte?

—Sí, me perdonará esto. Sé que lo hará, porque me quiere. Así que tu patético plan de hacer que rompa conmigo para poder reírte a gusto no ha funcionado. Y ahora sal de mi cuarto.

—Eso no era... Yo... —empieza.
Pero la interrumpo. Ya he malgastado bastante el tiempo con ella.

—¡Largo! —chillo—. Sé que probablemente ya estarás planeando tu próximo movimiento contra mí, pero ¿sabes qué, Lauren? Ya no va a funcionar. ¡Y ahora lárgate de mi puta habitación! —Me sorprendo de mis propias palabras, pero no me siento mal por usarlas contra ella.

—Eso no es lo que estoy haciendo, Camz. Pensaba que después de lo de anoche... No sé, creía que tú y yo... —
Parece que no le salen las palabras, cosa extraña en ella.

Después de ella [Camren G!P]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora