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× Confianza ×



Cray estaba camino a casa con paso animado, deseaba ver a su futuro esposo y tomar un buen almuerzo gracias a que no habían muchas personas que requerían de su trabajo.



Al ya estar al frente de su casa, vió el buzón, este daba señales de no haber sido revisado o posiblemente de que Goth le haya dejado una carta.



Prefirió quedarse con la segunda opción y revisó el cajón de metal, sacó la carta que estaba adentro y observó el nombre del emisor.



— Oh... No la leyó, eso es raro... El siempre anda al tanto del buzón... ¡Pero al menos cocinaré con él! — caminó hasta la puerta de su casa y entró con la carta en manos. — ¡Gothy, ya llegué!



Nadie respondió.



— ¿Goth, estás en casa?



Aún nada.



Dió una vista rápida desde la entrada a toda la sala, notó que uno de los sofás estaba con dobleces en los almohadones, como si un niño hubiera estado saltando sobre estos.



No le tomó importancia y se dirigió a su habitación a cambiarse de vestimenta.




. . .




— Bueno... ¿Solo café o algún aperitivo?



— Mmm... Solo café...



— Está bien, ¡Mesero!



Un joven se acercó a la mesa de Palette y Goth con una libreta pequeña y un lápiz.



— ¿Qué desean?



— Dos cafés, por favor, no muy cargados.



— Como ordene.



El joven hizo una pequeña anotación en su libreta y se fué dejando a los ahora amantes solos.



— Y... ¿Te gustó lo que pasó en la casa?



— Ehm... N-no quiero hablar mucho sobre eso...



— Oh, lo entiendo...



El silencio se hizo presente haciendo que la incomodidad reine en el ambiente entre ambos esqueletos.



— ... Mmm... Oye, Palette... Ya estamos en la situación romántica... ¿Algo que quieras decir?



— Es que, es incómodo, después de eso...



— Hmp... Ya veo... Espero que al menos se te olvide para mañana.



— Yo también...




. . .




Cray estaba en un mini market comprando cosas para hacer el almuerzo y la cena, estaba caminando hacia la zona de verduras cuando de encontró a Frisk, pero estaba sacaba tres cajetas de cigarros.



— ¡Hey, Frisk!



La joven se asustó y volteó con rapidez a ver al que la llamaba.



— Oh, C-Cray... ¿Qué... Haces aquí?



— Más bien, ¿tú qué haces comprando cigarros?



— ¡N-no son para mí!



— ¿Entonces?



— Ah... — miró a los lados para ver qué nadie estaba alrededor — Es que yo... Los revendo... Y gano un poco más de dinero... E-estoy ahorrando...



— ¿Para que cosa?



— Ah... Para cuándo sea mayor de edad... Independizarme...



— Pero si tienes el cuidado del convento y de Palette, ¿por qué te independizarías?



— ... Son cosas personales...



— ¿Palette sabe de eso?



— No.



— Mmm... Me parece extraño que no te haya acompañado al salir, ¿dónde está?



— Él ya se acostumbró a que salga sola, ¿no está en tu casa?



— ¿Por qué estaría en mi casa?



— Me dijo que iría a hablar con Goth.



— Mmm... No estaban, pero no te preocupes... Ah... ¿Sabes manejar una cámara?

Pecado [Poth]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora