× Hipocresía ×
Goth iba de regreso a su casa.
Esa "cita", si se pudiera llamarla así, fue todo un asco.
Primero, Palette siguió incómodo todo el rato, segundo, casi ni se dirigieron la palabra, tercero, Palette al terminar su café, se fue, dejándole solo de regreso a su casa.
No podía creerlo.
Al llegar, dió un suspiro pesado, y entró, un olor delicioso inundaba el ambiente, eso solo podía significar una cosa.
Cray estaba en casa.
Volteó a ver el sofá en el que cometió su pecado junto a Palette, seguía con los dobleces, Dios, cómo no pudo pensar en eso.
Fue con paso rápido hasta la cocina, pero no estaba Cray, solo estaba el horno encendido que ya estaba empezando a desprender un olor a quemado, por lo que el menor lo apagó y fue a la habitación, encontrándolo al fin.
Pero en una situación... Solo sigan leyendo.
— ¡¿C-Cray?! — un sonrojo empezó a cubrir su rostro al ver lo que su pareja tenía entre sus manos.
— Oh, Gothy... ¿Por qué esto estaba en la cama?
Cray tenía en sus manos el pijama de seda fina, Goth se había emocionado mucho con la idea de salir con Palette que ni siquiera guardo esa vestimenta femenina.
— Y-yo... — rápidamente inventó algo. — B-bueno... N-n-no pensé que... Vendrías... Muy rápido...
Ahora Cray también tenía sus mejillas coloradas.
— ... ¡T-tú querías...!
— ... — era perfecto para ser actor.
— V-vaya... Oh... Por cierto... ¿De qué hablaste con Palette?
— ¡Oh, con Palette! Justo iba a ir a comprar otras cosas... Pero no las encontré, al llegar al que sí me encontré fue a Palette y pues... Me invitó un café... Solo nos pusimos al día de todo lo que ha pasado... E-e-eso es todo... Y vine lo más rápido que pude para... Pues... Hacer el almuerzo y... Esperarte...
— Oh, Gothy... — se puso de pie y dejó el pijama encima de la cama para caminar hacia su amado y tomarle de ambas manos — Eso es lindo, a pesar que pensaba que íbamos a esperar hasta la Luna de Miel.
— B-bueno, si... Ahora que lo pienso... Deberíamos de esperar eso... ¿No te parece? — hizo una sonrisa incómoda.
— Mmm... Nop — con esto dicho, Cray abrazó a Goth por la cintura y empezó a besar con dulzura su cuello.
Algo que al menor no le estaba gustando para nada, pero solo hacía risillas, no debía de dar sospechas.
. . .
Palette llegó al convento con un rostro desanimado y triste, se sentía mal consigo mismo por haberse dejado llevar por el pecado, estando en un nivel en el que está.
Camino lo más rápido que pudo hasta su habitación y se sentó en su cama para después empezar a vestirse con su sotana.
Ya vestido, fue a la Iglesia, cabizbajo entró y caminó por el camino del centro llegando a la imagen de Cristo.
Alzó su cabeza y lo observó unos minutos, hasta que cayó al piso lamentándose de lo que había hecho mientras lágrimas salían de sus cuencas.
Estaba arrepintiéndose de su pecado con toda su alma.
— ¿Palette?
Volteó con rapidez su cráneo para ver a Frisk algo confundida.
— ¿Está todo bien?
El mayor se puso de pie y abrazó a su joven amiga, a la cual solo le quedó corresponder el abrazo y consolarlo, ya después le preguntaría el por qué de su estado.