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× Indecencia ×



Goth estaba sentando encima de la alacena mientras Palette le aplicaba un ungüento para sus irritadas costillas, ambos estaban ruborizados, uno más que el otro, por supuesto, el contacto que le daba en cada costilla era único, incluso a pesar de estar irritadas se sentían suaves y delicadas, como las de un ángel.



Después de aplicarle el ungüento, procedió a vendar la zona con vendas húmedas, algo que aún le dolía a Goth pero ya era un dolor menor.



- Listo, si no hubiera estado aquí, tus huesos se hubieran realmente quemado. - dijo mientras guardaba el resto de las vendas y el pote del ungüento en un pequeño botiquín que encontró en el baño gracias a las indicaciones del menor.



- Gracias, Paly, sinceramente, no sé que haría sin tí... - el menor empezó a mover sus piernas de adelante hasta chocar con la alacena, por mientras acercó su mano a su boca y alzó su hombro de la mano contraria, el estar sin vestimenta superior le convenía, y mucho.



- Lo voy a devolver, ¿está bien? - el cura sostenía el botiquín en sus manos mientras trataba de retirarse de ahí lo más rápido posible, era como un campo minado.



- Está bien... Pero antes.



- ¡Gothy, ya llegué!



El menor ya se había lanzado hacía Palette con intenciones indecentes, pero con ayuda de sus piernas pudo evitar caer encima de Palette, dirigiéndose hacia una caída con dirección al suelo, claro que el mayor evitó ello y al final, si terminó cayendo de la forma que quería evitar caer.



- ¿Qué fue eso? Goth, ¿estás bien? - Cray empezó a dirigirse hacia la cocina, al ya estar en la entrada vió a Goth de pie y con vendas en sus costillas, no llegaba a ver a Palette por la mesa de cocina que estaba en medio de esta. - ¡¿Pero qué te pasó?!



Palette al escuchar los pasos rápidos del mayor, empezó a gatear a velocidad rodeando la mesa estando del lado contrario al que estaban los otros dos, sentía que debía de salir de ahí sin ser visto por Cray.



- Oh, n-no es nada, solo me cayó un poco de agua caliente encima... - estaba muy nervioso, y se notaba, solo que Cray pensaba que era porque le daba pena admitir sus torpezas.



- ¡¿Cómo que no es nada?! ¿Ya estás mejor? - empezó a ver las vendas acercándose un poco y captando el olor del ungüento.



- S-si, me pude atender... - Goth alzó su vista un poco y vió como Palette salió gateando de la cocina.



- Uf... - dió un suspiro y abrazo a su pareja. - Gracias a Dios que estás bien, Gothy.



- J-jeje... - correspondió el abrazo tembloroso - N-no fue tan grave, Cray...



- ¿Y qué Palette no iba a venir? - se separó de Goth y lo sostuvo de los hombros.



- Ah... M-me dijo que tenía un percance, vendrá mañana...




. . .




Palette iba de regreso a la Iglesia sudoroso y con los pantalones sucios, había sido todo un manojo de nervios el estar en la casa de Goth.



Ahora que pensaba en él...



¡¿ACASO INTENTÓ BESARLO?!



¡¿POR QUÉ LO HARÍA?!



La mente del cura era ya todo un revoltijo de ideas y supociciones, debía de contarle todo a Frisk, pero ya.

Pecado [Poth]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora