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Miniserie, Cumpleaños

Capítulo 7

Shinichi

—¿Se puede saber qué haces? —escuché preguntar a Takagi tras de mí.

—¿Eh? —pregunté involuntariamente, ingresando a mi auto. —Estoy buscando quien me consiga pétalos de rosas. —le dije al verlo encender mi auto, por petición mía al tener las manos ocupadas.

—¿Puedo preguntar por qué? —me volvió a preguntar saliendo del estacionamiento de la policía.

—Quiero pedirle matrimonio a una chica. —le contesté simple, encontrando una buena floristería que venden las rosas baratas.

—¡¿QUÉ?! ¡¿El rumor es cierto?! —gritó Takagi, moviendo bruscamente el carro, casi chocando con otros autos.

—¡¡Takagi!! ¡¿Estás loco?! —exclamé alterado con el corazón casi saliéndose de mi pecho. —¿Y qué pasa con ese rumor? —pregunté irritado.

—Yo, yo... lo siento, pero es que... el rumor es sobre que estabas por proponerle matrimonio a tu novia, pero... ¡Nunca pensé que te le propondrías a Ran, quiero decir... no pensé que ya habían empezado a salir y eso! —me explicó nervioso.

Yo lo miré como si le hubieran salido dos cabezas, lo que decía era una locura. —Qué estás diciendo, ¡Claro que no es Ran! ¡No voy a salir con ella! Tengo novia y la amo mucho. —le respondí firmemente haciendo el pedido a la casa del Profesor Agasa. —Además, ¿de dónde salió ese rumor? —pregunté mirándolo con los ojos entrecerrados.

—Bueno... Yumi está esparciendo el rumor de que estabas pidiendo ayuda con un anillo de bodas. —volvió a responder nervioso.

Esa maldita Yumi, estaba preguntándole a mi madre por teléfono cuando saltó de la nada detrás de mí, a preguntarme un montón de cosas, por suerte me liberé de ella. —pensé molestó, sintiendo un deja vu, al volver a vivir lo mismo que con Sonoko. —Como sea, debido a esas cosas, es que se lo voy a pedir, he estado con ella durante años y creo que es el momento de estar juntos, además verla pensar que no es lo suficiente buena persona para estar a mi lado y ser feliz.

—¿Qué? ¿Por qué piensa...? —las palabras de Takagi-keibu se detuvieron cuando mi teléfono empezó a sonar, Ai me estaba llamando.

—Shi... —leyó confundido Takagi desde mi teléfono, de forma muy irresponsable apartar su mirada de la calle. Contesté sin prestarle atención a la curiosidad del detective Takagi.

—Hola, cariño. —me saludó apenas descolgué.

Tan tierna como siempre. —pensé como el claro estúpido enamorado que soy.

—Amor, hola, ¿qué pasa? Es raro que me llames a esta hora. —pregunté divertido sin dejar la ternura que me provoca

—Solo quería preguntarte qué te gustaría de comer hoy. —me respondí igual de divertida, teníamos el mejor juego de "coqueteo".

—No te preocupes por hoy, saldremos a cenar. —le respondí tranquilamente, al escucharla tan animada.

¿Será que ha descubierto lo que tramo? He sido especialmente cuidadoso.

—Bueno, la verdad tan sólo quería hablar contigo... es que de repente recordé cómo empezó nuestra relación. —me dijo, dejándome sorprendido, sonreí tontamente al ver lo sincera que estaba siendo conmigo.

—¿Eh? En serio, que divertido. —le dije entre risas, sabía que odiaba cuando era tan sincera, pero para mí era de lo más lindo y tierno. —Tal vez está noche podemos recordar nuestra primera vez también. —hablé atrevido, bromear con ella y ver sus reacciones es lo mejor de mi vida, e ignorando completamente las expresiones variadas de sorpresa de Takagi a mi lado.

—¿Qu-Qué... t-tú...? —me respondió nerviosa, seguramente debe tener el rostro colorado.

Quisiera verla. —pensé a gritos. —¿Qué? —pregunté inocente, como quién no rompió ni un plato. —¿Me dirás que no lo disfrutaste? Porque yo sé que sí. —volví a hablar atrevido, ver su rostro sonrojado, jadeante y que gimiera mi nombre una y otra vez. —Joder, esto es malo. —pensé acercándome al aire acondicionado del auto.

—H-Hey... ¿qué haces? —me preguntó Takagi, no le di importancia y me traté de calmar con el frío que transmitía en auto.

—¡Cállate, idiota! —me devolvió a la realidad su voz molesta, aunque sé que es por vergüenza.

—Oww, cariño quisiera ver tu rostro rojo. —le dije tiernamente, enderezándome en el asiento copiloto, me había logrado tranquilizar.

—Nos vemos después. —volvió a hablar, al parecer se había calmado, igual que yo.

—Bien, hasta la noche amor, ya lo estoy esperando. —le dije amorosamente como el buen novio que soy.

—Yo también lo espero. —me dijo feliz y tan tiernamente como solo ella podía hacer, me alejé del móvil al ver que colgó.

Di un suspiró de estúpido, mirando su número en la pantalla.

Shi 💘

—Te ves muy enamorado de ella. —me dijo Takagi, siguiendo el camino.

—Lo estoy. —le dije. —Claro que lo estoy. —pensé bloqueando el móvil.

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