F O R T Y O N E

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—Hija ahora no tengo mucho que decir —sonrie pesadamente como si le costará hacer aquel gesto—, más que estoy agradecido de que vengas a visitarme, últimamente solo has venido tu y tu padre, aún espero a Dylan pero su vida debe estar colmada.

—Cualquier vida con mi madre es colmada Nono. —él suelta una risa dificultosa y siento como mi corazón se parte en pedazos, él no parecía estar del todo bien.

—Me agrada mucho el hecho de que ya no estás bajo los mandamientos de tus padres Ally —dice con cariño—, pero deberías hacer las pases con tu madre y pasar más tiempo con Roberth, no eres irremplazable para nosotros, a todos nos hace falta tu presencia.

—No lo dudo —me encojo de hombros—, ustedes también me hacen falta a mi más de lo que creen, pero paso la mitad de mi tiempo ocupada.

—¿Con Harry? —suena burlón y niego—. No tengo problema con eso, yo conocí a tu Nona a la misma edad que tiene él, pero quiero que procuren no tener hijos a tan temprana edad, estamos en épocas diferentes. —rio de su comentario y niego con mi cabeza.

—Harry y yo no somos novios —él me ve con incredulidad—, ¿No me crees?

—¿Entonces que hacen dos jovencitos saliendo del país juntos sin ser novios? —hago una mueca con mis labios—. Harry parece un buen chico, un poco mayor, pero siempre he tenido en claro que a la mujeres le gustan los hombres maduros —suelto una carcajada y él la sigue—, ¿O me equivoco cariño? —niego con mi cabeza—, Alan también te llevaba casi la misma cantidad de años, no me queda duda que te gusten mayores que tu hija. —se que lo hacía para burlarse de mi, así que no le tomo mucha importancia a lo que dice.

La puerta se abre sin ser tocada antes y cuando veo la anatomía de mi padre entrar por la misma, un sentimiento extraño casi indescriptible para mí, me invade por completo.

Mi nono y yo volteamos al mismo tiempo para verlo y al parecer la más sorprendida soy yo, no esperaba ver a mi papá aquí, al menos no trabajando, pensé que aún seguía con su reposo indefinido, o seguía muy depresivo para seguir por ahora, pero lo veía relativamente bien.

La sonrisa en su rostro mostraba que había mejorado mucho, a pesar de que nunca lo ví triste después de que mamá y él se dejaron, pero con solo imaginarlo me bastaba, me gustaba verlo con esta nueva faceta, y habermelo encontrado aquí me llena el alma de tranquilidad y familiaridad, que realmente me hacía falta, su desaparición repentina me había hecho sentir olvidada, pero había logrado entender que él tampoco estaba muy bien.

—Ally, hija —me abraza con aprecio y lo imito—, no esperaba verte hasta la semana entrante ¿Has venido con Harry? —niego con la cabeza después de habernos separado.

—Vine sola —digo—, ¿Estás trabajando? —pregunto para dejar mi tema atrás.

—Solo estoy cumpliendo turnos en la mañana, y las intervenciones y operaciones que llegan durante el día, de otra forma solo me quedo en casa. —doy un asentimiento leve y después de eso la conversación solo se torna entre mi nono y él, y los dejo hablar por varias horas.

Escucharlos hablar y estar presente yo justo ahora con ellos dos me hacía sentir bastante tranquila, como si los problemas hubieran desaparecido.

Cuando ya daban las ocho de la noche, ya era hora de irnos para ambos, y después de una larga despedida de mi nono, mi papá y yo habíamos terminado en la entrada del hospital hablando.

—Ally, puedes ir a casa conmigo, he dejado de vivir en la casa de tu Nono desde la semana pasada, y si quieres puedes continuar tus estudios junto el trabajo que mantienes ahora.

—Tengo que pensarlo —juego con las llaves del auto—, no me quedan dudas de querer terminar la carrera, ya la comence y deseo terminarla, pero ahora mismo no deseo volver a casa, ni con mí mamá ni contigo, me siento bien viviendo sola —sonrío de lado—, y si eso implica devolverte el auto, te lo daré, porque no fui yo quien lo compro.

High Hopes H.S.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora