El Regreso a Casa

525 37 27
                                    

(Narra Joaquin)

Al terminar el show cada uno se dirigió a su camarín. Yo me apuré a recoger todo lo mío, tenía hambre y quería llevar a Lucía a un restaurante muy lindo de por aquí. Era nuestra última noche en "La Ciudad Que Nunca Duerme" y quería que fuera algo especial ya que le gusta mucho New York. Acabé todo y me dirigí a su camarín a buscarla. Toque la puerta varias veces y no recibía respuestas. Opte por sólo entrar y justo salía ya cambiada del baño.

__Lo siento amor, pero estaba terminando de vestirme por eso no te respondí._ me dijo acercándose a mi y dándome un pico.

__No pasa nada linda, pero igual me preocupé. Qué te parece si vamos a comer.

__¿Y no te parece tarde? Es media noche._ dijo recogiendo todas sus cosas.

__Tarde para nada. Por algo a New York le dicen "La Ciudad que Nunca Duerme" y a parte tenemos que disfrutar de nuestra última noche aquí, ¿No crees?.

__Ay ya ni lo menciones. De nada más pensarlo me pongo de mal humor.

__No me digas! Siempre has tenido mal humor._ me miro y nos echamos a reir.

__Joaquín ¿porque eres tan estúpido?

__Porque tú me haces actuar cómo estúpido. No ves lo enamorado que me tienes.

Me acerqué a ella y nos dimos un beso tierno y apasionado.

__Oye, ¿sabes que? He decidido que mejor tendremos sexo después del show y no antes_ dice sin más.

__¿Y porque? Tener sexo antes del show me dio mucha energía sabes.

__A ti!, porque a mí en cambio sentía latir mi concha con lo duro que me diste_ dijo en forma de reclamo.

__Ahh si, y quién me dijo que no quería ser tratada con delicadeza?

__Ya pelotudo, lo se._ ambos estábamos muertos de risa.

Amo esta relacion que estoy formando con Lucía. Hablamos de todo sin ningún tipo de tabúes. Y esto me gusta porque es algo que nunca antes experimenté.

Ayudé a Lucía con algunas cosas y nos dirigimos al auto que alquilé. Esta vez el teatro estaba retirado del hotel. Acomodamos todo y nos dirigimos a un lindo restaurante italiano. Nos estacionamos y me baje a abrirle la puerta a Lucía.

__Que caballeroso eres hermanito.

__Y tú tan tierna hermanita.

Reímos por nuestra complicidad. Caminamos hasta el restaurante y un  mozo nos atendió y nos llevo a una mesa retirada porque así lo pedí. Quería un momento romántico con mi mujer. La mesa en dónde nos acomodó quedaba en una pequeña terraza privada con vista a algunos edificios de la ciudad.

 La mesa en dónde nos acomodó quedaba en una pequeña terraza privada con vista a algunos edificios de la ciudad

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.


—Que lindo lugar Joaquín._me dice mientras saco la silla para que ella se acomode.

__Se que amas Nueva York y también la comida italiana, así que mejor lugar que este para traer a mí linda mujer.

Si Ella Supiera Donde viven las historias. Descúbrelo ahora