ONE SHOTS ° [A.G]

9. «WATTPAD: TERCERA PARTE»

AIDAN X PERSONAJE FICTICIO
ADVERTENCIA: ???

Aidan estaba aburrido.
Era sábado y había terminado como el buen niño que era todas sus tareas escolares. No le apetecía mucho ver televisión o salir afuera. Pasó horas navegando en las redes sociales hasta que se le ocurrió una grandísima idea que sonaba genial en su cabeza. Acostado boca abajo en la inflada alfombra de tela, con el celular en sus manos y un vaso de pipote implementado, lleno de agua de sandía, escuchando la música de Harry Styles; todo parecía tan cómodo y perfecto para hacer lo que estaba apunto de hacer.

Descargar Wattpad.

Había descubierto dicha aplicación la noche en que su amiga Andy dejó su laptop rosada en casa. Desde ese día algo cambio en Aidansito.

Realmente se podría pensar en que había descubierto todos los secretos de ese logo naranja y blanco, pero no, él tenía poco tiempo para estar metido en páginas cibernéticas y aparte Andy le quitó su laptop después de preguntarle unas cosas sobre el mundo de los fanfic. Él solo leyó unos libros en la biblioteca privada de su amiga, nada más. Así que su plan era simple, descubrir cómo funciona y que escondía.

El Internet bajó la app sin problemas. Creó su cuenta y posteriormente al estar en el buscador los primero que realizó fue lo más obvio. Sus dígitos se movieron en el teclado del móvil escribiendo: Aidan Gallagher.

Sus labios risueños atraparon el pipote absorbiendo la bebida dulce.

Inmediatamente un sin fin de novelas aparecieron. Sonrió al notar las portadas. —Hey, ese soy yo.—Señaló al verse en una de tantas. Entró en el primer libro. Siempre se abre el primer que se postule en la lista de los más leídos. Se le hizo interesante la trama pero no entendía cuando apareció el "TN_____". ¿Quién se llama así? Andrea no le había explicado éso y aparte ella sí fue más normal al ponerle nombre a sus personajes… Ja, T/N, raro y muy absurdo para que alguien se llamará como tal. La sinopsis fue la siguiente: Ella es la nerd que nadie ve, Aidan es el badboy por la que las chicas babean, ¿Qué pasará entre estos dos?» ¿Él el chico malo? Bueno, eso es nuevo, se dijo, y decidió que se lo tomaría como una interpretación para un papel en el mundo de la actuación. Al menos eso no lo pondría incómodo pero claramente no funcionó tras largos minutos. Aidan leía y dejaba de leer cuando un texto rosaba las emociones fuertes, se detenía en esos párrafos que le hacían pensar dos veces las situaciones planteadas.— Okeeyyyy…— Susurró incómodo por la actitud del personaje al seguir leyendo.—¿Que es esa rayita?— Se preguntó mientras bajaba la hoja del capítulo. Conforme corrió los primeros quince minutos fue acabado los veinticinco capítulos que eran muy intensos. No interrumpió su lectura aunque llegaban mensajes y llamadas. Estaba tan absorto que el exterior no le importó en lo absoluto. Éso era entretenido porque su "yo ficticio" hacia cosas que él jamás haría, como saltar de un avión. Tenía más acción y aventuras de las que él tendría en toda su vida.—¡Por qué, Aidan!—Gritó dolido en una parte crucial.—¿Por qué le hiciste eso? ¡Tú la amas!—Fue un impulso pequeño pero que al final lo llevó a saltarse  al epílogo querido acabar la ansiedad que crecía en su vientre. Tenía que acabar bien. Debía serlo. Suspiró al saber ahora que Aidan se quedaba con la tal rayita. Pero su felicidad definitivamente cambio al entrar en otro fanfic. El jugo natural preparado por su mami salió disparado por su boca como una ballena escupiendo el agua del mar. —¿Qué jodididas es esto? ¡Joder!— Dejo caer el aparato. Sus ojos seguían desorbitados y tenía de pronto el rostro tan colorado que entre un tomate y él no harían gran diferencia.—¡Yo nunca haría eso! ¡Toy chiquito!—-Se agazapo las piernas, sentado. Meciendose aún todavía traumado intentó quitarle peso al asunto afirmando que él ya se había topado con el mismo contenido. Pero una cosa es él y otra Sebastián Stan o Chris Evans. —Está bien, relájate.—Tomó el iPhone y salió de velozmente. Sus pulgares se dirigieron a la zona de perfiles donde buscó a su amiga. El usuario de Andy_1313 recayó en su vista. La siguió y se metió en la parte de obras creadas. Tenía docenas de ellas escritas. Muchas no tenían el mismo género y otras se basaban en películas u series… Hasta que halló una de las tantas. La boca de Aidan se secó al absorber aire dado en shock.—¿Ella escribió sobre… mí? ¿Yo?—Tartamudeo. Los dedos le temblaron al hundirse en la creación de Andy. Seguía atento a casa línea, está vez lo hacía más concentrado y más minucioso, querido entender los sentimientos en las letras y poder imaginar lo que pensaba su amiga cuando lo hizo. Sus codos dolían de estar en esa posición pero no le daba prioridad. Sus ojos rato después se aguadaron tras extenderse en la octava edición. Se perdió en las horas sin fijarse que se oscurecio el cielo, no fue hasta que sollozó diciéndole a su madre que pronto bajaría a comer. Estaba experimentado una crisis en esos momentos.

—¿Aidan?— Preguntó la voz de Andrea tras la bocina del celular.—¿Y ahora qué quieres?

—¿Pp-or qué?— Gimoteó, lloroso.

—Aidan no se de que hablas.—Se escuchó como la chica cambió de ambiente porque de pronto ya no se oía ruidos de música.—¿Estás bien? ¿Qué sucede?

—¿Y todavía lo preguntas?— Un pequeño llanto de hipos vibró desde su garganta.—Eres tan mala.

—Me estás asustando.—La ansiedad de percibió en el tono de la chica.

—¡Me mataste!— Chilló.

—¿Qué?

—Por un carro.

—N-o estoy… ¿Espera qué?

—Tú has acabado con mi vida, hiciste que me atropellara un carro.

—Estoy perdida, lobito.—Admitió, Andy, la cual estaba en su recámara caminando en su cama a la vez que atendía a Aidan y limaba sus uñas.—Explicate, por favor.

—Leí tu fanfic.— Soltó con amargura.

Hubo un silencio en la otra línea.

—Asomate a la ventana.—Pidió suavemente la muchacha, Aidan reconoció aquel tonillo como uno peligroso y molesto. Sin embargo, acató la orden muy lento y corrió las cortinas. Desde donde estaba pudo ver las luces encendidas de la habitación de su amiga. Andy estaba ahí, parada perfectamente, enseñando su dedo de corazón y sosteniendo con una mano su celular.—Tú no aprendes.—Negó.

—El enojado debo ser yo por haberme matado y por utilizar mi imagen, tarada.— Limpió sus lágrimas.—Te voy a denunciar.

—Pues la borró.— Refuñó la otra.

—No haré nada si tú cambias el final.—Propusó en modo de negocio.

—Puedo hacer otra historia pero definitivamente no lo voy a cambiar. Me gusta así.

—¿Qué este muerto?— Insinuó ácido, y colgó.

Antes de que Andrea realizará cualquier movimiento él cerró las ventanas y se lanzó en el suelo aún llorando.