ONE SHOTS ° [A.G]

7. «MANDONA»

AIDAN X PERSONAJE FICTICIO
ADVERTENCIA: ????
Titulado: «MANDONA»

—¡Duele! ¡Aidan duele!—Grité.

—Lo siento, lo siento...—Saltó a disculparse con arrepentimiento.—No quise ser tan rudo, Lily. Seré más cuidados e ire lento, lo prometo.

—Eso espero...—Entonces se movió con extrema lentitud pero cada movimiento de su parte provocaba que sintiera una punzada de corriente eléctrica por todo el cuerpo.—¡Dios! Ve más rápido—pedí al borde de llanto, me estaba retorciendo agónica.

—¿Qué?—me miró expectante—. Lily, ¿quien te entiende? Segundos atrás me has dicho que vaya lento.—Chasqueo la lengua con molestia.

—Pues retiró lo dicho.—Jadee. Ya algunas lágrimas corrían por sus mejillas.—Entre más lento más dolor siento.

—Bien—solto un bufido y con la pequeñas pinzas metálicas entre sus manos sacó las estillas profundas que se habían enterrado en mis palmas. Lo hizo tan veloz que ni siquiera me di cuenta hasta que grite y vi las gotitas de sangre salir por la comisura de la piel.—Media hora intentado sacar unas estúpidas astillas ¿y está era la solución? ¿Hacerlo rápido?—dijo mientras se giraba al otro extremo del sillón y tomaba el estuche de primeros auxilios para sacar el bote de alcohol y algunos trozos de algodón. Una vez con las cosas listas empezó a limpiar la mínima herida de la palma de mi mano dañada.

Se mantuvo muy expresivo y en completo silencio cuando acabó con todo. Su mirada nunca topó con la mía.

—Éso parece. Hacerlo rápido.—Sonrei para estabilizar un poco el ambiente pero él se mantuvo serio. Rodé los ojos por su actitud. Decisiva, tomé un cojín del sillón y se lo lancé pero él siendo más rápido lo esquivo para mi mala suerte.—¡Dios, Aidan! no es mi culpa que al intentar de limpiar la mesa de madera con un trapo me hubiera astillado accidentalmente. Así que por favor quita tu cara de amargado y ve el lado bueno, ya podemos ir a comer pizza.

—Sí pero pizza fría—recogió el cojín y me lanzó el contraataque sacando su lengua de una manera infantil. Sabía que él no podía estar completamente enojado conmigo.

Tomé el cojín entre mis manos antes de que aterrizará en mi cara.

—Y puedes estar con tu novia comiendo pizza fría—repuse.

Aidan sonrió.

—Cuando lo dices así suena mucho mejor.

—Es porque lo es—me puse de pie y caminé a su dirección para a traerlo de su mano hacia mí. Él se inclinó enseguida de tal modo que nuestras caras quedarán muy cerca. Admirada, retire los mechones que caían por su frente con cariño. Se veía simplemente hermoso.— Ahora bésame.

—Eres demasiado mandona, ¿lo sabías?—Comentó.

—Sí, ya lo me lo habían dicho muchas veces. ¿Por qué no me estás besando?
—Inqueri con enojo. Aidan rodó los ojos pero me beso entre risitas.

Una vez separados le di el cojín y me fui a la cocina por la jarra de jugo y algunos vasos.

La tarde sería divertida sin duda.