KARMA

45. Explosión

La mañana avanzaba de forma fría y dura en Karma, teniendo a todos sus integrantes de mal humor y con bastante pesar por todo el conflicto que estaba sucediendo. Los policías jefes continuaron rodeando perímetro en busca de Rubius, pero aun cuando Fargan y Alex se fijaban en cada roca, hoja y césped, no hallaban ninguna especie de pista o rastro. Auron y Lolito estaban ordenando la iglesia para convertirse la zona del juicio, preparándose sentándose en sus respectivos lugares. Una sonrisa siniestra y cruda salía entre la boca de Auron, pues aunque no quería admitirlo, iba a desquitarse en ese juicio con Luzu por lo que le había hecho a su cuerpo, considerarando nada más que su resentimiento.

Vegetta apenas pudo despertarse al escuchar a Willy llamándolo, desvelado y aun con cierta tensión por la noche anterior en su espalda, costándole mayor esfuerzo salir de la cama. 

—Venga perezoso, tenemos que ir al juicio-comentó Willy moviéndolo ligeramente.

—Pero todavía falta-se quejó en la almohada Vegetta viendo como apenas salía el sol.

—Pero si hoy hay un buen de cosas que se pueden hacer-contestó el albino abriendo las cortinas.

El azabache soltó un quejido molesto al sentir la luz en sus ojos tapándose con la manta, haciendo que Willy se riera y negara con la cabeza, acercándose para encontrar su cabeza entre las sábanas y besarle suavemente los labios.

—Es que aquí tengo que hacer todo yo, como por ejemplo esta casa-murmuró sonriendo antes de alejarse.

—¡Yo he hecho todo diario!-reprochó Vegetta adormilado-¿Y qué dices de haber construido esta casa?

—Dulces sueños Samuel-se burló el albino antes de salir.

Willy empezó a guardar algo de comida en una mochila y sus armas, decidiendo cazar un rato antes del juicio de Luzu para poder relajarse. Salió tranquilamente caminando en dirección a los bosques esperando no encontrar muchas sombras en el camino. Los días pasados habían sido completo caos y aun cuando le encantaba saber o enterarse de todo, había estado demasiado metido con Vegetta como para entender algo. Le daba curiosidad la forma de actuar de Lolito, Auron y Fargan, sabiendo que estaban planeando cosas por detrás de las oficinas y fachadas de una alcaldía legal. Era interesante para él ver como se metían tanto en su papel como funcionarios, pues el jamás se vería en esa posición. Cada día veía de lejos como Alex y Fargan de alguna forma se sentían poderosos siendo policías, o Lolito creía que era el rey del lugar.

—Este juicio es un chiste-soltó para sí burlándose.

Para el todo era una farsa y un juego de policías y ladrones mal hecho; no era como que de un día a otro podía hacerse un gobierno funcional ni debería ser. Era un juego.

Lo único realmente serio era lo que estaba pasando con Luzu, pues parecía ser que realmente había sido transformado en otra persona por Karma y las personas que le habían hecho daño. Su amigo estaba perdido en la vida y roto, y todo había sido culpa de los chicos en las sillas grandes del ayuntamiento.

Intentó no pensar demasiado en ello, queriendo enfocarse en cazar algunos animales para venderlos en el pueblo, viendo a lo lejos unas sombras parecidas y listo para atacar.

En el principio del bosque y el inicio de una parte del pueblo, Auron, Fargan y Lolito estaban listos para armar el plan que el chico vestido de búho había propuesto.