Capítulo 22

146 23 2
                                    

22 - Libro en llamas

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

22 - Libro en llamas

La tensión que nos rodeaba era palpable. Luke y yo desde nuestra posición en la cima de las escaleras no teníamos otra opción que esperar.

Me sentía inutil. Odiaba no poder hacer nada, ya sea por que no podía o por que me paralizaba el miedo. Siempre quise ser la persona valiente que toma la iniciativa en una situación como esta, pero simplemente no podía.

Había algo acerca de la voz de aquel hombre, o el hecho de que Domicic parecía estar increíblemente intimidado por su presencia que no me permitía ser esa persona que quería.

Luego de unos minutos que parecieron ser eternos, Luke murmura algo como "se fueron al sótano" y toma mi mano nuevamente. Me arrastraba escaleras abajo a una velocidad que mis pequeñas piernas temblorosas no podían alcanzar, y estaba segura de que si no fuera por el agarre que tenía con el rubio, hubiera caído rodando por los escalones.

Una vez que cruzamos la puerta, estoy por detenerme a tomar aire, pero Luke me sigue arrastrando hasta su auto. Me abre la puerta y me da leves empujoncitos en el brazo para que me meta.

A pesar de la poca iluminación que había en la calle, podía notar como sus ojos estaban alerta a nuestro alrededor.

Cuando el se metió al auto y comenzó a andar, decidí que era momento de las preguntas.

—¿Qué acaba de pasar?

Mis manos aún temblaban pero ahora podía sentir que respiraba con normalidad; mis ojos ya no acumulaban lagrimas pero aun estaban cristalizados. El miedo aún circulaba en mi sistema pero ya no me paralizaba

Luke decide no responder, solo se limita a apretar el volante entre sus dedos largos y anillados.

—¿Quién era ese hombre? — pregunto de nuevo.

El chico a mi lado hace una pausa. —El padre de Dominic. — me responde entre dientes mientras apretaba su mandíbula, como si la mención de aquel hombre le causara enojo.

Decido no hacer más preguntas porque simplemente no sabía cuáles hacer. No era estúpida, podía notar que el tema era algo delicado y que claramente yo no tendría que haber presenciado lo que ocurrió.

Reconozco que Luke comienza a hacer el camino a mi casa y por dentro me pregunto cómo es que lo sabe. Quizás Oliver se lo comentó.

Una vez que estamos en la puerta de mi hogar, Luke detiene el auto y mira al frente. Sus ojos aún miraban hacia todas direcciones frenéticamente aquel junte de sus cejas parecía no querer irse de su rostro.

—¿Tú estás bien? — pregunta de repente, su mirada alterada ahora puesta en mi.

—Creo que sí. — me sincero.

Su postura parece relajarse apenas. —Bien.

Dirijo mi vista hacia la ventana a mi costado y a través de las ventanas noto que no hay ninguna luz encendida, y tampoco están los autos de mi padre y Kevin.

Beyond The RuinsDonde viven las historias. Descúbrelo ahora