Herederos Por Obligación {Yoonmin// Omegaverse} (En Edición)

Capítulo Diecisiete

Peleas, mentiras, malentendidos, traición, infidelidad. Desamor.

No supe como llegué a mi casa, solo cuando me di cuenta, la puerta estaba enfrente y mi mano temblorosa estaba indecisa entre abrir o esperar un poco a que estuviera mejor.
Algo dentro de mí me decía que debía entrar, debía llegar a mi cuarto y quedarme ahí hasta que las lágrimas dejaran de bajar por si solas, así que solo gire la perilla y entre, en ese momento mi vista fue hacia aquellas dos personas que estaban sentadas en el sillón, las cuales también voltearon a verme; mi madre tenía en brazos a la otra persona, quien también tenía sus ojitos rojos por todo lo que al parecer había llorado.

-Taehyung... ¿Que haces aquí?

Él no me dijo nada, solo se levantó y me abrazo fuertemente, no tenía ni idea de lo que pasaba, pero por alguna razón igual lo abrace fuerte, intentando darle consuelo con mis brazos y parecer la figura firme que justo ahora necesitaba, pero en cuanto escuche como un sollozo entrecortado salió de sus labios, no pude aguantar más y también comencé a llorar.
Ambos estábamos derrumbados, pero estábamos refugiados en nuestro lugar seguro.
Mi madre subió hacia su habitación para dejarnos solos, y tras un par de lágrimas más, ambos decidimos separarnos.

-¿Qué pasó?
-Tu me debes una explicación primero
-Jungkook...
-Yoongi...

Alfas.
No tenía bien entendido que era lo que había pasado con Taehyung y Jungkook, pero en este momento mi dolor pasó a segundo plano y solo intenté consolar a mi alma gemela, ya que en el estado que estaba era demasiado complicado que hubiera tenido una pelea con su alfa.

–¿Llamó a Seokjin?

Mi amigo no me dijo nada, solo con un puchero y sus ojitos todos rojos asintió levemente, así que me dio su teléfono para poder marcarle. El lindo tono de voz del omega se escucho del otro lado del teléfono, contestando con una pequeña pizca de exaltación.

–¿B-Bueno?...

¿Seokjin?–

–S-si... Joonie, para un poco...

Lo último lo dijo susurrando, aunque aún así se escucho, por lo que solté un pequeño suspiro y solo negué para mí mismo. Al parecer habíamos llamado en mal momento.

Olvídalo, te llamo más tarde...–

–¡No! Se escucha algo raro en tu voz... ¿Estas bien?

Bueno, estamos dos personas aquí en mi casa con el corazón roto...–

–Taehyung... Fresita... No, no, iré para allá en seguida

Descuida, tu termina, nosotros tendremos la buena compañía de un helado de chocolate...–

–Y... ¿Puedo llevar a mi novio o es solo una reunión de no alfas?

Como tu lo prefieras–

El rostro confundido de Taehyung se veía muy tierno, sus ojitos aún cristalizados y sus mejillitas rojas y abultadas un poco mojadas por las anteriores lágrimas, además de un adorable pucherito.

Solo ven... ¿Si?–

–Claro

No me había vuelto muy cercano a Jin en estos días, sin embargo necesitaba un consejo de alguien fuera de la relación, alguien maduro y pensante, ya que ni Tae ni yo estábamos en disposición para pensar bien en alfas.