El legado de Cain (Parte II)

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Hola mis amores, esta historia tendrá un par de saltos en el tiempo. Espero no los confunda demasiado. Aquí vamos. notarán que cambiaré la tipografía cuando  la línea temporal sea un recuerdo  para hacérselos más fácil hasta que ambas líneas temporales se unan al presente así que... pues ya veremos como sale esto. 

Meses antes...

La puerta del cuarto se abrió y Jesse alzó la vista. El sitio era blanco. Cálido. Malditamente inmaculado, casi como un sueño asfixiante y tropical.

—¿Eric?-Jesse saltó de la cama corriendo todo lo rápido que su cuerpo le permitió hasta su esposo apenas verlo . Su cuerpo estaba completamente desnudo, expuesto, vulnerable. Se apretó a él dejando que Eric lo envolviera. Parecía que estaban solos.

—Mi Ángel—susurró Eric estrechándolo entre sus brazos, el cabello de Eric olía bien. Siempre olía bien. Salvaje y afrutado, Jesse aspiró sintiéndose un poco mareado. Eric estaba ahí, todo estaba bien ¿no?

—¿Eric que está pasando? Eric dónde estamos. Eric.—Jesse se apartó un poco, aun lucía desorientado mirando el cuarto a su alrededor.

—Tranquilo mi angel. Tranquilo.—Eric intentó acariciar su rostro para llamar su atención.

Un relampagueo de dolor azotó la cabeza de Jesse haciendo que diera un paso atrás por el mareo.

—¿Jesse estas bien? —Eric lo atrapó por los brazos guiandolo hasta la cama.—Acuéstate. ¿Que te duele ?

—Mi cabeza. Eric—Los ojos de Jesse se aguaron mientras lo obedecía, hacía calor, a pesar de todo, el clima era ligeramente húmedo y vaporoso. Eric lo cubrió con una fina sábana blanca mientras Jesse se palpaba la cabeza. Dolía como el infierno.

—Tranquilo, está bien. Es normal. tuviste un accidente.

Cierto. Jesse recordaba eso. Jed, él había hablado con el Dr. Jones, antes de ver a Eric inyectándole  algo ¿o había estado soñando? Pestañeó confundido. Tenía que levantarse. la ciudad estaba en llamas. Su ciudad a la que había prometido proteger, él había visto cómo ardía. Tenía que levantarse, tenía que...

—Estoy desnudo. —Dijo mirando hacia abajo.

—Te traeré algo de ropa.—Eric hablaba despacio, con pausas, como si temiera que no comprendiera sus palabras. Jesse lo que no comprendía era la situación.

Eric hizo amago de levantarse pero Jesse se lo impidió tomándolo del brazo. No quería quedarse solo. Estaba asustado.—No te vayas.—Dijo.

Los ojos de Eric se clavaron en él y asintió. lo vio sacar su móvil de sus pantalones, Eric iba con unos pantalones blancos y una holgada camisa blanca. Lo vio intercambiar un par de palabras antes de que un jovencito se acercara a la puerta con un conjunto de ropa muy similar al que llevaba Eric. Todo de lino. Todo blanco. Todo muy parecido a la muda de Ropa que acababa de entregarle a Eric. 

Jesse tomó las prendas de las manos del pelilargo  con desconfianza como si no supiera cómo colocarlas.

—Es blanca, ¿Por qué todo es blanco? No me gusta que todo sea blanco ¿Estoy muerto? —El labio inferior de Jesse tembló y Eric se echó a reír sin poder contenerse. —No te rías. no quiero estar muerto. yo.—Jesse sorbió por la nariz y Eric se obligó a sí mismo a contenerse mientras echaba su cabello hacia atrás acomodandolo, estaba ligeramente más largo de lo que recordaba.

—Siento que todo sea blanco. Es un lugar de descanso, es normal Jess, mandaré a que te traigan ropa de colores. Lo prometo.

—¿Lugar de descanso?

—Si. Jess. Recuerdas que te operaron, abrieron tu cabeza mi angel, necesitabas descansar. Este lugar te ayudará a ponerte bien.

—Oh... espera ¿que?

— Digamos que ...¿Te secuestré?—Eric le sonrió como un niño pequeño que acabara de confesar una travesura, su sonrisa llena de hoyuelos era contagiosa. Jesse le devolvió la sonrisa sin poder evitarlo. ¿Era broma cierto?

—Estabas inconsciente—Continuó explicando aprovechando el momento de Shock del rubio— me tocaba decidir por ti, no fue difícil sacarte del país en un avión sanitario.

Los ojos de Jesse se ampliaron como platos.

—No es broma.—Se dio cuenta viendo la mueca de Eric.— oh, lo estás diciéndolo en serio ¡Eric! ¡Devuelveme a casa!

—no es así como funcionan los secuestros Jesse.

—Tú,-t- tu no puedes secuestrarme!

—Ya lo hice. 

bueno mis amores, aquí está Jesse jajj espero no los confunda demasiado esto de los "recuerdos"  los amodoro, nos vemos. 
🖤