-Te casaras con Mei en nombre de Noa… lo sé. Pero ¿cuándo harás lo que TÚ QUIERAS? –le dijo pegándole con el dedo índice en el pecho. –Dices ser libre pero creo que de todos eres la más cautiva. No eres distinta a Mei solo que eres peor porque eres prisionera de un pasado que no recuerdas y del cual no quieres renunciar.
-Ya lo sé. –replico airada. –Lo sé, ¡ya lo sé!
-Entonces si ya lo sabes, ¡Por qué mierda sigues haciendo estupideces!
-¡Porque tengo miedo! -grito llorando. –Tengo miedo, ¿de acuerdo? Tengo miedo a no ser lo que mi madre merece, a no cumplir la promesa que le hice a mi propia hermana que murió para salvarme del puto cáncer, ¡tengo miedo a no ser nadie!
Ambas se miraron asustadas por la confesión y Luka se llevó las manos al pecho en gesto compasivo, cosa que termino por destruir la poca postura de indiferencia de Yuzu. Se dejó caer en la cama con unos pasos lentos y se tapó la cara con las manos.
-Yo… yo leí una versión de mi increíblemente cobarde con su familia y deseosa de sentirse viva. La gente que dice conocerme cuenta cosas de mi que describe un aventurero dispuesto a vivir el momento, alguien valiente… y cuando me contaste de lo que era contigo puedo encontrar a alguien temeroso de la vida, que siempre busco aceptación; un lugar en el mundo para ella y que solo encontró en ti. –las manos pasaron a su cabello y la miro con frustración. –Y de todas esas versiones, la tuya es la que se siente real, es la única que me consoló… porque allí no debo esforzarme por parecer fuerte, simplemente soy yo.
Luka se acercó con cuidado a Yuzu, cuidando de no alarmarla con su proximidad.
-Sí, hago estas cosas por Noa, porque es mi pago por lo que hizo por mí. Se lo debo también a mi madre, al abuelo… a Miyuki… a Mei. A todos. –sonrió ligeramente y miro al frente. –Nunca he logrado algo para mí, todo es en pro de los demás o simplemente huyo del problema. Incluso ahora estoy escapando del problema.
-¿Cuál es el problema? –le cuestiono sentándose a su lado, con una distancia de un brazo. -¿Es sobre Kitajima?
-No es… no es él o Ume. Mis madres no tienen nada que ver. –se mordió el labio. –Me refiero a, a…
-A Mei. –dijo Luka por Yuzu y este asintió en silencio. –Te sientes culpable por estarla usando para aliviar la culpa y por desearla, ¿no?
-Noa la amaba realmente. Mientras yo solo me siento atraída sexualmente… esa chica merece algo mejor que sobras… merece a alguien que la ame como se debe-
-Merece a Noa. –completo la oración que no podría nunca decir Yuzu. –Por eso intentas ser ella, para poder enamorarte de Mei como tu hermana. Intentas ser alguien que no eres y eso te causa un fuerte conflicto; continuar amándome a mí, como la verdadera tú o intentar amar a Mei como el suplemento de Noa. –le puso la mano en la rodilla en gesto materno. – ¿Eso sucede o me equivoco?
Yuzu no respondió, solo asintió con los ojos cerrados y bajo las manos para ponerlas en la cama. Luka se recargo en su hombro y suspiro un tanto feliz, tarareo algo que no identifico Yuzu y abrió los ojos, la miro y supo que olvidar a esa mujer sería difícil.-¿Qué hago, Luka? –le pregunto en un susurro imploroso. –Ya no sé qué hacer… siento que esto es un sueño largo que no terminara y en algún momento comenzara a volverse pesadilla.
Luka acaricio el brazo de Yuzu y le tomo de la mano con cuidado, entrelazo sus dedos y se las llevó a los labios para besarle el dorso a su amante. Yuzu la miro sorprendida y ante la imagen solemne y seductora que le ofrecía Luka, un impulso de dejarlo todo e irse con Luka a donde nadie les pusiera una cadena en el cuello le nació. Ya estaba separando los labios para hacerle el ofrecimiento cuando la chica alzo la mirada y con ojos decididos le hizo saber lo que haría y eso le dejo destrozado.
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EN BUSCA DE LA LIBERTAD (CITRUS)
FanfictionMei Aihara siempre tuvo una vida recta y educada sin cuestionar ninguna orden. Un día, decide ir a una fiesta por curiosidad y conoce a Yuzu; una joven que siempre hace lo que quiere sin miedo. Comienza a darse cuenta de que no quiere una vida llena...