EN BUSCA DE LA LIBERTAD (CITRUS)

CAPÍTULO XLV: RENCUENTRO FRATERNAL (1)

NOTA: me falto un pedazo del capitulo, una pequeña que considero importante porque es parte del juramento entre Yuzu, Luka y Noa. Me gustaría que leyeran solo la parte subrayada como a mitad de capitulo. No es necesario que relean todo el capítulo, solo vayan a esa parte y verán una pista sutil pero contundente de lo sucedido. Pido una disculpa por este error pero al parecer se borro y no sé en que momento.

***

Luego de que ambas llegaran al orgasmo, Yuzu intento preguntarle a Mei porque
había tenido esa expresión asustada. Por unos momentos Yuzu sintió que Mei
recordó aquella tarde donde esos patanes intentaron violarla y eso la distrajo de
su propio cansancio y cuando ya estaba por despertar a Mei, la azafata toco la
puerta.

-Señor Okogi, el capitán desea hablar con usted de inmediato. -dijo con voz profesional sin pizca de la vergüenza que le dio escuchar cuando hicieron el amor.

Yuzu apretó la mano que extendió para tocar a Mei y suspiro algo enfadada.

-Dígale que voy en unos instantes, por favor.

-Por supuesto, señor Okogi. Con su permiso.

Yuzu comenzó a vestirse y tapo a Mei con una sonrisa tierna. Cuando estuvo lista para salir se miro al espejo que estaba en la habitación y se cercioro de verse presentable y salió. La azafata le esperaba con expresión atenta.

-Por favor, que no salga de tus labios lo que paso, por favor.

La mujer sintió profesionalmente.

-Otra cosa; ¿recuerdas que te pedí comprar ropa?

-Sí.

-Déjala preparada, yo se la daré cuando regrese.

-Como guste. ¿Algo más, señor?

-Te informare luego.

Yuzu se marcho dejando a la mujer mirándole la espalda hasta que entro a la cabina del piloto. La mujer saco el móvil y tecleo el resumen y suspiro, adoraba las lagunas legales porque sus labios no dijeron nada, solo sus dedos teclearon los sucesos para su jefa.

- ¿De cuánto es el retraso? -dijo Yuzu seria.

-Tres horas a cuatro. -respondió el capitán.

-Bien, hazlo entonces. -Yuzu salió de la cabina algo molesta y aliviada.

-Por favor, cuando comencemos el descenso llama a Vlad Kosav, esta en mi agenda y consígueme un vehículo.

-De acuerdo. Aquí está la ropa.

Yuzu tomo la ropa con cuidado y entro a la pequeña habitación donde Mei dormía levemente. Cuando escucho la puerta abrirse se despertó rápidamente y se asusto de creer que era uno de sus padres. Cuando miro a Yuzu suspiro aliviada. La rubia le extendió ropa y sonrió tímidamente.

-Ten. Esta limpia.

-Oh, gracias. Aunque no pienso usar ropa un poco más. -sonrió con mirada lasciva y Yuzu le beso la frente.

-También me gustaría que no la usaras pero debes vestirte. -le extendió la ropa. -Hay problemas climáticos y el piloto debe aterrizar para no entrar a la tormenta que esta en estos momentos, estaremos tres horas a cuatro hasta que la tormenta termine o disminuya.

-Ya veo. -la tomo y se incorporo un poco. -Donde estaremos.

-Rusia. -dijo sonriendo. -Tierra madre de Kata y de sangre de Luka. -se levanto para dejarla vestirse. -Despertare a tus padres cuando termines, cariño.