-Nunca me imagine estar sentada en un lugar de comida rápida contigo, Mei-san. -dijo Matsuri bebiendo su refresco. Harumin estaba allí algo incomoda y no hablo.
-Ya sabes el porque estamos aquí. -dijo ella seria.
-Quieres saber más sobre Yuzu. Lastimosamente no puedo decirte mucho de nada. -encogió los hombros. -Desde pequeña fue siempre alguien reservada con su vida privada. Por eso nos ha pedido discreción y tampoco es que nos interese divulgar algo.
-Mencionaste que odia a la gente acomodada, ¿por qué?
Matsuri sopeso la pregunta y se preguntaba si podía responder a eso y qué podría decir. Era difícil tocar la vida de su mejor amiga. Se habían conocido cuando Yuzu tenia 8 años y se mudaron cercas de su casa, le gustaba sonreír, pero siempre trataba a todos con algo de distancia, como si temiera algo. Por más que le pregunto a su amiga de eso, nunca recibió respuesta.
-Una mujer de categoría humillo a su madre. No sé qué sucedió ni quien fue, tampoco me interesa saberlo si no me lo dice por cuenta propia y te aconsejo no investigar sobre ella. -se mordió el labio. -La ultima persona que trato de dar con su pasado termino con todos los huesos rotos.
- ¿Y por eso las odia? -no le pareció grande la ofensa.
-Hay otra cosa, solo que no puedo decírtelo. -se rasco la cabeza. -Hacerlo significa morir y aun no me he cogido a una universitaria.
-Siempre con tus comentarios vulgares. -dijo Harumin pegándole en la cabeza.
-Como sea. Si deseas saber sobre Yuzu deberás preguntárselo tú misma. -sonrió.
- ¿Y qué te hace pensar que me dirá?
-El sábado podrás hablar con ella, tal vez se hagan amigas. No es como si estuviera a tu alcance ese rango mas sin embargo algo me dice que este encuentro puede ser beneficioso para ambas.
-Quieres mandar a la presi como carne de cañón antes de pedirle a Yuzuchi que te lleve a uno de sus viajes.
- ¿Carne de cañón?
-Yuzuchi es alguien amable por lo tanto no se enoja fácilmente, después de esos episodios suele mostrarse más amable para compensar su explosión. Ahí es donde entra Matsuri, luego de gritarte se mostrará arrepentida. Matsuri le pedirá seguirla y Yuzuchi dirá que sí. -meneo la cabeza. -Juntarte con Hotaru te ha vuelto así.
Mei continúo viendo como discutían y se sintió aun más humillada al recordar que las personas menos adecuadas para saber su pequeño desliz en la fiesta eran Hotaru, Yuma, Matsuri y Harumin. Aun cuando Okasaki y Taniguchi fueran de confiar no le aliviaba la carga. Las personas más astutas y con tendencia a burlarse estaban al tanto y con mejor información que ella misma.
-Que maldita suerte la mía. -dijo suspirando mientras soportaba las ganas de azotar su cara contra la pared.
***
-Mi niña, pareces a punto de saltar de un puente. -dijo Kata mirándola con curiosidad. - ¿Ha sucedido algo?
-Bastantes cosas. -respondió bebiendo su té. -No encuentro al abuelo por ningún lado.
-El señor Aihara salió por negocios, volverá el domingo por la tarde. Su cumpleaños está cerca, ¿ya pensó que desea de cumpleaños?
"Que esa tal que Yuzuko diga que no recuerda nada y yo poder sacármelo de la cabeza" pensó exhausta. Pincho su pastel y se ganó tiempo para calmarse.
-Me complace pensar que comeré tu curry ese día. -respondió.
-Una niña todavía. -rio la ama de llaves y palmeo la cabeza de su señorita con afecto. -No ha cambiado mucho desde que era una niña. Oh Tsubasa, que bueno que llegas, tal vez podrías convencer a Mei-chan de que pida algo decente.
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EN BUSCA DE LA LIBERTAD (CITRUS)
FanfictionMei Aihara siempre tuvo una vida recta y educada sin cuestionar ninguna orden. Un día, decide ir a una fiesta por curiosidad y conoce a Yuzu; una joven que siempre hace lo que quiere sin miedo. Comienza a darse cuenta de que no quiere una vida llena...