El Emperador y mi Príncipe "©"

Jungkook

Primer Capítulo ****

-Señor emperador que va a hacer? Tiene que casarse o si no el Consejo le quitará su trono. -

-No se Hoseok, la verdad es que no puedo casarme con cualquiera, lo sabes bien.

-Porque no se casa y después que tenga su primer hijo se separa?

-Puede ser Hoseok, pero al a verdad esto me está hartando.

-Hagamos algo entonces. ¿Qué tal si hacemos un Baile de Gala e invitamos a todas la princesas y doncellas de los reinos aledaños y de ahí usted escogerá alguna para ser su futura esposa?

-Es una buena idea Hoseok; envía todas las invitaciones que puedas, comunicando que el Baile de Gala que se llevará a cabo en seis días, mientras más rápido salga de esto, mejor. Así me sacaré al Consejo de encima de una vez.

-Bueno señor, así lo haré, hasta luego.
-Ya te vas?
-Si me voy porque Yoongi me está esperando.
- Ah ok entiendo. Salúdame a Yoongi Hyung y dile que venga a visitarme. Hace mucho tiempo que no lo veo.
-Bueno, se lo diré, me retiro si no necesita nada más de mí.

*Hoseok se retiró y me quede pensando que solo faltaban seis días para el Baile de Gala y conseguir a mi futura esposa, aunque no quisiera, pero era necesario para mantener mi trono. Tengo muchos enemigos que quieren destruirme y el maldito Consejo que quiere arrebatarme el trono. Si mis padres estuvieran vivos ellos no tendrían el valor de decirme nada. Pero no están, ellos fallecieron en un accidente por lo que me coronaron a mis 17 años. Llevo 7 años siendo emperador, pero el Consejo me exige que debo tener una esposa para que me ayude a seguir gobernando y me dé un sucesor. Como quisiera que me dejaran en paz, no necesito nadie, sé cómo regir. Mi padre fue el mejor Emperador y deede pequeño estuve viendo cómo regía y como todos lo respetaban. Aprendí del mejor, aunque no pensaba que me tocará estar en su puesto tan temprano. Te extraño mucho Appa.

Alguien toca a la puerta sacándome de mis pensamientos.

-Señor, han traído su cena.
-Bien, que pase.
-Buenas noches, señor
-Buenas noches-. En esos momentos veo un chico rubio entrar con la bandeja donde traía la cena. No podía creer lo que mis ojos estaban viendo. No soy fácil de impresionar, pero este chico hizo que mi corazón diera un salto. Su dulce voz, sus largas pestañas, por un segundo pude ver sus hermosos ojos azules, tan azules como el mismo cielo y su perfecta figura me dejó totalmente deslumbrado. Su piel parecía porcelana y unos labios hermosos, este chico era imposible de no admirar.

-Eres nuevo? Conozco a todos los sirvientes de mi palacio y nunca te había visto aquí.

-Si señor, empecé a trabajar recientemente.
-Cual es tu nombre chico?

-Me llamo Jimin señor- lo dijo en voz baja, tan dulcemente mientras hacía una reverencia, pero, aun así, lo llegué a escuchar. Esa voz que no me cansaría de escuchar todos los días. Pero qué estoy pensando, contrólate Jeon.

-Y de dónde vienes? lo noté un poco nervioso y se mantenía con la mirada en sus pequeñas manitas. Me era difícil dejar de observarlo, cada movimiento que hacía.

-Del sur mi señor.

-Oh, que bien. Y- ya te puedes retirar, gracias-. Vi como su carita se sonrojaba. "Lindo" pensé.

* Cuando el sirviente se fue me quedé pensando, mejor dicho, embobado, esas curvas, esos ojos tan bellos, tan azules y ese trasero  que pudiera... Aishh, Ya Jeon!! en qué estás pensando? a mí se supone que me gustan las mujeres, pero, por qué este chico alteró mi mente con su sola presencia? aunque por él puedo hacer una excepción-. Suspiré profundamente, -debo estar loco pensando en eso.

Terminé de comer la cena, me di un baño y me acosté, esperando que mañana pueda ver esos ojos que me volvieron loco...

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650 palabras. Espero les haya gustado el primer capítulo. Estaré subiendo los próximos mientras los edito.