Sólo somos ¿AMIGOS? - Neymar y tú.

Capítulo 33.

Estaba en shock, sólo podía mirar a Ney, que no articulaba nada. No sabia cual iba a ser su reacción. ¿Cómo ha podido pasarme? Dios, ¡es que soy gilipollas! No me he tomado ni una pastilla. Soy estúpida.

__: ¿De cuanto estoy?

DS: De tres semanas.

__: Eso es casi un mes. - resople.

Nos despedimos del médico y salimos a la sala de espera. Ney seguía sin hablar. Me pare en seco y él también.

__: ¿Estas bien?

Él seguia sin decir nada.

__: Ney, cielo...

Ney: Sí, si..

Me acerque a el y le cogí la cara entre mis manos.

__: Ney, si no quieres... Yo..

Me callo con un beso, lento y lleno de amor. Amor que sentíamos el uno por el otro.

Ney: Claro que lo quiero. Llevas algo mio en ti, es fascinante... Te quiero.

__: Te quiero, Ney...

Salimos de la clínica y el coche de mi primo nos esperaba en el mismo sitio que nos dejo. Antes de subir al coche, hizo una foto a nuestras manos y la subió a instagram.

" Ahora más que nunca. " - @Neymarjr vía instagram. (Multimedia)

Nos subimos en el coche y arranco. Marina miro hacia nosotros y hablo.

Marina: Nena, ¿qué te ha dicho?

__: Pues me han dicho de que vais a ser titos. - sonreí.

Mi primo freno en seco, su cara se giro hacia la mía. Sus ojos tenían un brillo especial.

Marc: Me estas diciendo de que... ¿voy a ser tito?

Ney: Sí, vas a ser tito, campeón. - extendió su mano hacia mi barriga y la poso sobre ella.

Marina se bajo del coche y abrió mi puerta, entro y me apretó tanto que me asfixiaba.

Marina: Felicidades, nena. Vas a ser una madre estupenda.

__: Gracias cariño. - le bese la mejilla. - pero me estas asfixiando tita.

Se separo y subió a el asiento de alante.

Marc: Muchas felicidades, moco. - sonrió.

__: Gracias.

Marc: Y a ti bro.

Ney: Gracias, bro. - me miro y sonrió. - Davi se va a poner muy contento.

Yo asenti, voy a ser mama. Que fuerte, dios.

****.

Llegamos a mi casa, Ney se quedaría esta noche a dormir. Fui hacia mi habitación y me cambie. Cogí un pantalón de chándal gris y una camisa de tirantes blanca.

Ney: Nena, ¿pedimos chino?

__: Vale.

Ney: Llama a tu madre y diselo.

Sonreí, busque mi móvil en el bolso. Cuando lo encontré, llame a mi madre.

M: Cielo, ¿qué te ha dicho el médico?

__: Mama.. Estoy embarazada.

M: ¡Ay cielo! Que alegría. Que voy a ser abuela. ¡Ay! Felicidades cariño.

__: Muchas gracias, mamá.

M: ¿Vas a hacernos una visita?

__: Sí, intentare ir este verano, ¿vale?

M: Vale, cielo me tengo que ir. Mañana hablamos ¿vale?

__: Claro, te quiero.

M: Te quiero cariño.

Colgué el teléfono y lo deje encima de la encimera, Ney estaba en el sofá viendo un partido de fútbol. Me acerque a el por detrás y lo abracé.

Ney: Vas a ser una madre estupenda, lo criaremos juntos y con Davi.

__: Si, tengo ganas de que venga para ver su carita cuando le diga que va a ser el hermano mayor. - le di un beso en la cabeza y le di la vuelta al sofá y me senté en el.

Ney: Se va a poner muy contento y mis padres y Rafa.

__: Pues si. ¿Oye lo vamos a hacer publico?

Ney: Claro, vamos.. A mi me da igual, ¿a ti?

__: Como quieras, cielo. - sonreí.

Ney: Voy a ser otra vez papá... - miro hacia la tele y sonrió. - Quiero que sea una niña.

__: Lo que sea, que venga bien.

Ney: Eso es lo importante.

****.

Terminamos de cenar y fuimos a mi dormitorio, me puse a leer la trilogía de mi hombre, el ultimo libro. En el Ava se quedaba embarazada de mellizos y Jesse los llamaba cacahuetes. Que gracioso. Mire a Ney, que seguía viendo fútbol. Leí un poco más, puse el marca páginas y lo cerré. Me estirace en la cama y me quede contemplando a Neymar. Era guapísimo, me tenía loca. Bueno a mi, y a otras 30.000 personas como poco. Esos ojos verdes y mieles, su nariz puntiaguda pero no larga, sus labios finitos pero carnosos, su barba de 3 o 4 días que le hace un aspecto más hombre. Y su tatuaje en su cuello, ese tatuaje en el que dice que "todo pasa". Cuando me di cuenta, vi a Ney mirándome fijamente, me había pillado mirándole y me puse roja como un tomate. El me sonrió con esa sonrisa dulce que tiene y me dio un beso en la frente.

Ney: Te lo repetiré tantas veces cuanto pueda... Me encanta cuando te sonrojas, nena. - me beso con ternura. - ¿Y qué hacías? Admirar las vistas... ¿no? - movió las cejas arriba y abajo con su típica sonrisilla pícara.

__: Serás creído. - reí.

Se rió conmigo y siguió viendo el fútbol. Yo seguí mirándolo hasta que me quede profundamente dormida.