Mi Vida Como Saiyajin

Capítulo 5: Llegando al planeta Pukui

 Bardock realmente nos salvó, si no hubiera intervenido no tendríamos oportunidad alguna de ganar. No se si hara caso a mi consejo. Lo que realmente me resulta extraño es la saiyajina que estaba detrás de él. Si no recuerdo mal de la película que vi de joven la compañera de Bardock era realmente diferente con una actitud mucho más agresiva, en cambio la que está ahora con él tiene una expresión muy amable. ¿Mis acciones ya cambiaron algo en la historia? No, imposible, apenas si he interactuado con alguien desde que llegue. No pude haber cambiado ningún suceso aún. Esto es muy confuso.

- A-Aikon, ¿estas bien? Tienes una cara extraña.

 Mientras estaba inmerso en mis pensamientos May me hablo. Se ve que estaba haciendo una cara rara para que realmente preocupe a los demás. 

- No es nada May, solo es que, por mi culpa casi morimos, realmente estoy enojado conmigo mismo por ser tan débil. Prometo hacerme más fuerte para que nunca estemos en peligro de nuevo.

 Todos tenían expresiones raras en sus caras, era claro que a ninguno le gusto perder de esta manera, incluso la siempre alegre Chaya tenía una cara seria en su rostro. En cuanto a lo que dije es la verdad, aunque no podía decir lo que estaba pensando, sobre el tema de Bardock, también es cierto lo que dije, necesito hacerme mas fuerte, mucho mas fuerte o no sobrevivire en este nueva vida que me dieron.

  No estuvimos mucho tiempo en ese lugar, luego de asesinar con mis manos al otro soldado de Freezer nos apresuramos a subir a la nave para partir. En este punto realmente es muy útil Onnio, él es el único que sabe manejar estas cosas, al parecer su padre lo llevó en muchos viajes con él para que se hiciera más fuerte, aunque no funcionó muy bien gracias a eso pudo aprender cómo funcionan las naves espaciales.

- Aikon, ¿a donde deberíamos ir? 

 Oh, no lo había pensado, ¿deberíamos ir a la tierra? Me gustaría ir pero los sucesos que conozco no suceden hasta dentro de muchos años, Goku aun debería ser un niño por lo que más de diez años deben ser. Si voy ahora y cambio algo perdería una gran ventaja más adelante. Buen por ahora evitaremos la tierra. 

- Onnio, busca el planeta comercial más cercano y vayamos allí, si el planeta Vegeta se destruye como creo, tendremos que depender de nosotros mismos, en ese lugar podremos hacer algo de dinero por el momento.

- Entiendo, dejamelo a mi. Deberíamos llegar en dos días.

 La partida fue muy tranquila, no había mucha seguridad en la zona por lo que nadie interfirió. Por fin puedo estar tranquilo, con esto pude evitar el destino de los saiyan, pero lo que viene ahora no será fácil. Fuera de lo que vi en el anime no tengo más información por lo que estaré caminando a ciegas por el momento, espero poder sobrevivir.

 No pasó más que unas horas, aun no nos habíamos alejado demasiado cuando de repente sentimos un impacto, fue la onda expansiva de la destrucción del planeta Vegeta, cuando los demás vieron esto todos se pusieron a llorar. Aun ninguno me creía por lo que la tristeza de perder a sus familias los golpeo fuertemente. En cuanto a mi, bueno no llegue a conocer a mis padres en este mundo, y aunque tengo los recuerdos de ellos gracias al Aikon original, no se sienten realmente mi familia por lo que estoy bien.

 Los dos días pasaron bastante lentos, todos estaban sumamente tristes por lo que apenas se dijeron algunas palabras durante todo el viaje. Fue bastante incomodo pero no tenía tiempo de ponerme a consolarlos, durante los dos días estuve revisando todo lo que tenía la nave. Una vez que lleguemos necesitamos conseguir dinero rápido, a pesar de que teníamos bastantes provisiones no nos durará más que  para un mes, dos considerando que como niños comemos menos. 

 En la nave había bastantes cosas, en especial muchas armaduras y rastreadores. Luego estaban unos especies de contenedores con diferentes minerales, pero ninguno de nosotros sabe su uso por lo que solo lo venderemos al igual que los rastreadores y armaduras que no vamos a usar. Además de eso había un objeto que fue tratado con mucha importancia pues tenía una sección de la nave muy grande reservada para dicho objeto aunque este era bastante pequeño. Era una especie de collar con joyas. Al principio pensé en venderlo pero con tantos preparativos que usaron para guardarlo me da miedo venderlo por el precio erróneo, asique solo lo guardaremos por el momento.

 A llegar los demás no sabían qué hacer por lo que me preguntaron a mi.

- Lo primero es vender esto lo antes posible, una vez que la gente sepa que los saiyan desaparecieron perderemos nuestro poder para negociar. En este momento aún nos tienen miedo pues nadie se atreve a ofender a una raza como la nuestra, pero si se llegara a conocer que solo somos unos débiles niños, no solo no comerciaran con nosotros sino que enviaran a alguien para robarnos. Asique apuremonos y vendemos todo esto ya mismo.

 Luego de contarles los motivos por los que deberíamos apresurarnos Arugu y Onnio fuimos directamente al mercado mientras que las demás se quedaron cuidando la nave. En este punto ninguno de ellos era de ayuda, pues eran solo niños sin conocimiento alguno en este planeta. 

 Este planeta se llama, planeta Pukui, aunque la mayor parte de su superficie es arena, su ciudad principal es muy próspera como punto comercial, dado que está ubicado en medio de varios planetas se volvió en un punto en común para las transacciones. Los habitantes de Pukui aprovecharon esto y se hicieron mercaderes con muy alta reputación en la zona, o eso dijo Onnio.

 Aunque tengo miedo de cruzarme con soldados de Freezer, no podemos ocultar nuestras colas, tenemos que demostrarles a todos que no somos niños normales sino que somos de la poderosa raza de los saiyans. Aun si es muy arriesgado también lo es que nos ataquen bandidos comunes. Desconozco la fuerza de estos últimos pero pueden llegar a ser más problemáticos que algunos soldados de Freezer transeúntes. Así, sin mucha preparación, nos metimos al centro del mercado para buscar algún mercader interesado.