La Voluntad Del Reencarnado

Robo

A la mañana siguiente me dirigí a un riachuelo cercano, me lave la cara y tome algo de agua, luego de esto llame a Kalio este apareció, le pregunté sobre la noche anterior y este me aseguro que todos los bandidos eran demasiado orgullosos como para hacer parte de la orden, la verdad algo me decía que ese no era el único motivo, luego de esto le dije que de preparará pues partiríamos hacia Dhalemir la ciudad más peligrosa del país.

Asesinos, bandidos, traficantes, villanos, violadores, las peores escorias del país vivían hay, por lo que nos dirigiriamos hacia allí para reclutar a unos cuantos, además de que según Issac hay vivía un viejo amigo que podría ayudarme con algunos objetos y ropas para los chicos por los UE ir ya no era un opción.

Luego de planearlo me dirigí al refugio y al llegar ni Dylan ni Lyan estaban y mucho menos Marie la heroína, me desespere y empecé a buscarlos, esto no me gustaba para nada y como yo suponía habían marcas de botas, esto me pareció raro, pues ambos hermanos estaban descalzos, unas 25 huellas, lo que me dio la certeza de lo ocurrido fue una cadena de esclavitud que encontré además de unas cuantas manchas de sangre y marcas en los árboles, era claro alguien más estuvo aquí y se llevó a los niños.

Esto me lleno de ira y sin pensar llame a Kalio y le di la orden de buscar a los gemelos, mientras tanto yo buscaría a mi manera.

« viaje sombrío »

Con esto empecé a desplazarme atraves de las sombras en buscá de información, pero el bosque era demasiado grande para recorrerlo solo si tan solo tuviera más subordinados.

~~~ grito de mujer ~~~

Pensé que el fruto podría ser de Lyan y me dirigí al origen de este y al llegar no era más que un grupo de mercaderes siendo atacados por una banda de ladrones y asesinos, no tome importancia pero entonces lo vi uno de ellos tenía la espada de Marie por los que subí a la copa de un árbol atraves de la sombra y llamé a Kalio este llegó rápidamente, una vez estaba aquí la orden era simple, matar a todos esos bastardos y si alguno deseaba ser parte de la orden que lo hiciera, pero había alguien a quien no podía dejar que el tocará y era a aquel que usaba la espada de Marie.

Una vez tuvimos todo claro nos dirigimos hacia ellos, lo primero que hice fue derribar a aquel que tenía la espada de Marie, una vez lo derribe empecé a interrogarlo, mientras que los demás o morían o eran reclutados, de unos 50 hombres solo quedaron 20 los cuales fueron reclutados por Kalio los demás sufrieron una horrorosa muerte de parte de Kalio.

- bien tienes dos opciones, opción A me dices dónde obtuviste la espada o opción B te dejo a manos de Kalio
- yo, yo, yo lo te diré nada
- opción C será

Rápidamente use mi coraza en mi mano y con está se crearon unas garras a base de esta y sin dudarlo de la clave en la pierna derecha, este soltó un grito de dolor tan esplendido que le clave mis garras unas 4 veces más solo por placerny también por qué seguía sin decir nada, molesto use minas bajo la manga, con esto me mordí la vena de mi otra mano y de esta un líquido verde y maloliente salió, este entró en la boca de aquel imbécil y le expliqué su situación.

- a ver imbécil acabo de darte una pequeña cantidad de veneno, es lo suficientemente fuerte como para matarte en unos segundos y al mismo tiempo te hará sentir el infierno por lo que te queda de vida, para tu suerte tengo el antídoto pero quiero que me digas de donde sacaste la maldita espada!
- yo, la....de.... Boris.... El...conde... Fausto...Lhoinwick

Edad fueron sus últimas palabras, rápidamente mire a los mercaderes los cuales estaban horrorizados con esto y les pregunte sobre ese tal Boris, estos me dijeron que el era el dueño de la ciudad de Hayl una ciudad cercana a Dhalemir, a donde ellos se dirigían.

Esto era bueno usar a los mercaderes para entrar y una vez la orden sería simple buscar a los chicos a cualquier costo, así mismo se desarrollo mi plan le propuse a los mercaderes ir con ellos pero estos por el miedo no querían viajar conmigo, si no estaba este camino estaba lleno de bandidos y ladrones por lo que era mejor dejarles en claro las cosas.

- haber no les estoy pidiendo permiso de ir con ustedes hoy a ir con ustedes así tenga que matarlos me entendieron?
- s, si

Con esto claro nos dirigimos hacia Hayl de camino a este fuimos atacados por una que otra banda criminal, pero todos ellos morían o se unían a la orden de Kalio, mientras tanto yo encontré una daga de hoja negra y empuñadura demoníaca, debido a mi tamaño está era tan larga como mi antebrazo, era funcional, la tome sin que los mercaderes se dieran cuenta y esto ocurrió.

[ Has adquirido la habilidad: Robar]

Bueno era claro como la conseguí.

*****3 horas después*******

Luego de unas horas llegamos al lugar, este estaba resguardado por murallas de piedra bien hechas, rápidamente llame a Kalio y pregunte por los números que poseía y este me fue lo más sincero del mundo.

- mi señor tenemos unos 79 subordinados bajo su mando.
- tantos!?
- si mi señor, se que pueden ser un pequeño número, pero los demás preferían la muerte a unirse a usted

" Creo que aqui hay un erro no creo que sean números tan bajos, por lo menos esperaba que fueran unos 30 o 25 pero 79 era un número que me parecía algo extraordinario para nosotros"

Con esto listo entramos a la ciudad de Hayl con una sola meta buscar a Dylan, Lyan y Marie y como tarea especial matar al maldito de Fausto Lhoinwick.