Superheroicos ■Tu Y Comodin■

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^Omnisciente

—La imaginación.

—¿En serio? —pregunto confundida—. ¿De verdad?

—Si, pero tienes que controlar tu poder, eres muy poderosa pero igual peligrosa, por eso vine a entrenarlos —le dijo y sintió que esto ya había pasado este momento.

«¿Déjà Vu?».

—¿Como...? ¿Tengo que imaginarlo o...? —le preguntó sin entender.

—Pues no, normalmente ese poder es muy peligroso, tan solo piensas en lo que quieras y ya lo tendrias, pero si lo controlas podrías incluso hacerlo sin pensarlo —le dijo mientras le regalaba una sonrisa.

—¿Que pasa si no lo controlo?

La chica ya había empezado el día con el pie izquierdo.

—Cosas malas, o también el fin del mundo —lo dijo tan sencillo que le causó un temor tan grave—. Ve a sentarte, luego lo hablamos.

La ya conocida televisión, bajo del techo mostrando las noticias.

—Cosas de ultimo momento, ahora mismo estan robando el banco principal con mínimo 138 reenes, al parecer la policía no puede hacer nada más que esperar.

—¿Van a ir los heroicos? —pregunto Adelantar.

Granada se puso al frente de todos y Lara se fue a sentar dónde antes estaba.

—¿Que paso? —le preguntó Comodín, susurrando.

—No nada, nada importante... —le respondió en un susurró.

«Solo que mi poder es muy peligroso que si no lo manejo causaría el fin del mundo, nada importante».

—Bueno. ¿Están listos para su primera misión? —pregunto sonriendo.

—¿QUE?

—¡Andando! —ordeno y todos se levantaron de sus lugares, Granada salió y los demas atrás de ella, murmurando el por qué ellos y por qué no van los adultos.

—Que mal que no tenemos un atuendo para esto —bromeo Acapella.

—¿Te preocupas por el atuendo? —le pregunto Espagueti.

—Era broma, solo quería tranquilizarlos... —le respondió mirándolo.

—De hecho si hay atuendo, no queremos que descubran sus identidades, ¿o si? Usarán también chaleco antibalas, están armados y no queremos que queden lastimados —dijo Granada llegando a una puerta y la abrió lentamente.

Los chicos entraron y vieron los atuendos, eran de color negro, se veían muy cómodos y máscaras oscuras.

—El negro siempre es un buen color, buena elección, Granada —halago Acapella agarrando una prenda.

—Gracias, Acapella, todos tienen que estar listos en menos de cinco minutos, chicas a la derecha y chicos a la izquierda, en el coche les explicaremos el plan.

Todos asintieron y fueron por sus trajes, se cambiaron, Ruedas tardo un poco más al igual que Cámara lenta, todos corrieron hacia afuera de la base, estaba una camioneta gris, se habrio la parte de la cajuela y era todo lo contrario de un coche normal.

Una mesa con luz en el centro, asientos al rededor y un espacio para Ruedas, atrás de los asientos de adelante.

—¿Que esperan? Suban, rápido, necesitamos que ustedes salven vidas inocentes y detengan ese robo.

—Bien, subamos.

Ruedas fue el primero en subir, luego Adelantar, después los demás.

—Bien, ¿cuál es el plan? —pregunto Comodín viendo a Granada quien se bajó del auto.