Black Onyx [1]

PRIMERA LUNA

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LA SOLEDAD CON LUNA LLENA

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(Después de la cena)

Jessica me lleva a empujones hacia un lugar que yo no conocía del castillo. Su apretón cada vez dolía mas. Yo sudaba frío, con un dolor punzante en mi pecho porque no podía respirar. Trate muchas veces de soltarme y correr, pero ella lo apretaba sin piedad que dejaría una intensa marca.

Solloce, tratando de buscar ayuda en los pasillos, pero claro que nadie se enfrentaría a la alfa suprema.

—Tenía que seguir leyendo, la sabiduría es un derecho, la ignorancia un delito, Jessica —Exclamo—Que sería de nosotros si no rompiéramos las reglas, un gran filósofo dijo...

Me interrumpió, abruptamente:

—¡No quiero tu sermón de mierda! — Me grita, haciendome temblar— Te advertí lo que iba a pasar si me desobedecías.

Me detuve bruscamente, pero ella me superaba en fuerza y logra avanzar conmigo.

—No, por favor— Le rogué.

Ya sabía adónde me llevaba, bajamos unas escaleras de piedras y el viento helado impacto mi cara. La desesperación llena de lágrimas mis ojos. Los barrotes se veían sucios, en la esquina del calabozo se encontraba una cama roñosa. 

Jessica apretó más mi brazo cuando intente escapar. Abrió la puerta con agilidad y me lanzó con la misma a dentro del oscuro y frio lugar; yo ya me encontraba llorando a mares al escuchar el candado cerrarse sin retorno.

—¡Jessica no me dejes aquí, no me gusta la soledad, por favor! —Le rogué entre sollozos, pegado mi cara a los barrotes.— No lo vuelvo hacer, te lo juro.

Ella volteó hacia mí.

La duda se cruzó en su mirada, pero fugaz su estadía en ella. Se volvieron frívolos, tal y como los conocí, se notaba que la piedad jamas sera lo suyo. Solté un largo y doloroso sollozo que no le causó nada.

¿Por qué es tan cruel conmigo?

— Si pudiera matarte aquí y ahora, podría cumplir ese deseo —Escupe sin piedad alguna —Pero te pudrirás aquí las nueve lunas, y después gozare tanto arrancarte la cabeza.

Me congele, como si hubiera apretando un interruptor. El miedo me paralizó. 

Se va sin voltear, sin escuchar mis plegarias. Solo se fue, como si yo no valiera nada, tal y como mucho me hicieron sentir alrededor de mí vida. Me deslice por los barrotes hasta caer rendida en el piso frío de mi cárcel, y llore, llore como no la había hecho hace muchos años. La impotencia que guarde salió a la luz entre gritos y patadas a los barrotes.

Me esforcé tanto en alegrar mi vida, pintarla de colores que no existían, fingir que estaba bien, sonríe, reír... ¿Pará qué? Siempre soy yo la que se rompía en mil pedazos.

No sirve de nada ser un buen ser humano. No podía negar lo que yo era: Un estorbo, una falla, una huérfana que nunca nadie quiso. Un pedazo de mierda que no es lo suficientemente valiente para acabarlo todo. Mi existencia es irrelevante para cualquier ser en la tierra.

*****

Lo se, es muy corto por eso no lo contare como un capitulo y subiré otro capitulo al rato.  Tuve una idea: Después de una cierta cantidad de capítulos (no creo seguir un patrón ) subiré las lunas que deben trascurrir en la historia, que son 9. Bueno.. bueno.. eso quería aclarar.

Gracias por leerme <3

Les agradezco mucho por ayudarme con los votos y comentarios en mi historia. Pero sobre todo, recomendarlo para llegar a mas lectores. Me hace muy feliz.

Bye.