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EL NIÑO
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JESSICA FAVREMe encontraba en el salón de entrenamiento, Vicente sostenía el saco de boxeo mientras yo descargaba todo lo que acumule esta atareada semana en él. Diana. Estrellé mis nudillos en el saco una y otra vez, apretando los dientes. Esa humana tonta sabe cómo sacar lo peor de mí, sin duda.
—¿No vas a hablar de eso? —Pregunta Vicente cuando detengo mis golpes.
Fui por mi toalla y mi botella de agua, con Vicente presionado para que hablara.
—¿Es por los humanos del norte?—Insiste, al sentarse junto a mí.
Bebí un gran sorbo de agua antes de contestar—Mierda, eres demasiado chismoso.
Él me observa sin descaro, trataba de analizarme. Tener de beta a tu mejor amigo era un jodido problema, no podías ocultarle nada; sin siquiera decírselo encontró la razón.
Esbozó una sonrisa de pura diversión —La humana un día de estos va a matarte—Se burla de mí.
—No la soporto—Espeto mientras seco el sudor de mi cuello con una toalla.
—Al parecer eres la única, Carlos la adora —Masculla un poco celoso y sacude su cabello húmedo frente a mí.
Claro que la adora, si son tal para cual: Tercos, nunca se callan y quieren salvar a cada criatura del maldito planeta. Realmente molestos.
—Por qué no te relajas y tienes un buen polvo— Sugiere—Bianca está en la zona sur.
No iba a preguntar como lo sabía, no quería meterme en asuntos que involucraban al hijo pródigo de mamá y su frágil corazón. Era mejor mantenerme en la ignorancia, y no me metería en problemas luego.
—Prefiero la abstinencia que estar con ella otra vez—Respondí con sinceridad.
Vicente ríe a carcajadas.
—Entonces, ¿Qué harás? —Cuestiona —Te pones de mal humor cuando no tienes sexo.
—Tengo cosas más importantes que atender, y tu también. No necesito otro escándalo,. Mamá te tiene en la mira —Le advertí acabando con sus burlas hacia mí y mi falta de coito.
Bajó el cabeza avergonzado.
Vicente Lauper le temía a una sola cosa y era al compromiso. Su promiscua vida no le permitía serle fiel a mi hermano, y su vínculo no dejaba alejarse de él. Ese molesto vínculo fue producto de una noche de borrachera, despecho, drogas y una pizca del entrometido de mi padre que llevaron a ambos a unirse en una relación donde no hay amor y sólo obligación por una de las dos partes. Compadezco a mi hermano muy en el fondo.
Me sonaba tan parecido.
Las puertas se abrieron y dos empleados entraron, uno de ellos explicó torpemente cuál era el problema.
Le ordene a mi beta se encargará de ellos mientras yo iba a vestirme, ya que no podía atenderlos en ropa deportiva, no sería profesional.
Yo lista y con mi traje, no espere un segundo para bajar al salón de conferencias en la zona oeste del castillo. Al llegar al lugar, me di cuenta de que Vicente no sabía cómo calmar una multitud sobre natural.
Al verme, todos se apartaron y bajaron la cabeza con respeto.
Puede contar entre 20 a 25 personas de la manada. No sabía a lo que venía. Los daños de los híbridos ya fueron compensados y la vigilancia fue reforzada, además que sólo hubiera dos muertes, humano que andaban de metiches en nuestro bosque.

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Black Onyx [1]
Teen FictionLa piedra de onyx negro te brinda protección de todos los males, quien la posea debe ser una alma pura e inocente. como Diana Ayleen, una chica que aspira a ser la mejor versión de ella y que lucha constantemente con esos pensamientos endemoniados ¿...