Capítulo 5✔️

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Narrador Drag Müller

Debía de admitir que lo que vi no fue lo que esperaba.

Cuando por fin el supuesto Ángel se quitó la bata, dejó ver a una figura muy pequeña y delicada a comparación de su contrincante. Una mujer de entre dieciocho y veinte años, con cabello rojizo como la sangre y con una piel blanca y delicada. Al principio pensé que era una broma. Una mujer así no duraría ni cinco minutos.

He estado involucrado en la milicia desde que tengo uso de razón, las peleas cuerpo a cuerpo son tonterías para mí, y por eso sé lo que se requiere para poder enfrenarse con un un sujeto como ése.

Cuando escuché al presentador iniciando con su discurso de apertura, quede encantado al vislumbrar su cuerpo, pues a pesar de la distancia se podía apreciar su prominente trasero, uno tan perfecto que dudaba que fuera real. La pelea inicia, y los idiotas que me acompañaban estaban sumamente interesados en ella, así que no habría inconveniente en seguir su ejemplo y disfrutar del espectáculo.

Al finalizar el primer asalto, todos vemos como la niña está malherida, sin embargo, se mantiene en pie, y de manera increíble gana en el siguiente asalto; fue tan inesperado que ni ella ni el público no se lo cree, lo admito, yo tampoco lo creí posible y si no hubiera sido por que lo vi, no le diera crédito. La multitud se queda atónita por unos segundos, hasta que el presentador indica que ella es la absoluta y única ganadora.

Sergey estalla en felicidad, y mis hombres igual, por mi parte sólo sonreía. Ya que, me entraron unas ganas inmensas de conocerla y aún más de poseerla. Lobo y Tiburón se largan a una de las habitaciones especiales con un par de putas cada uno.

Tanto Perro como Sergey me miran intrigados, y el último con una sonrisa dice:

— ¿Quieres conocer a mi Ángel, Müller?

— Has hablado tanto de ella, y quiero saber de mis mercancías, que te la aceptaré — digo lo más desinteresado posible, pero en realidad moría por verla.

Manda a llamar a unos de sus hombres y le dice que busque a MI Ángel, ya la había bautizado como mía, y próximamente así será. Caminamos lentamente a su despacho y al llegar me ofrece un trago de whisky, el cual acepto gustoso.

— Müller, deja de pensar en eso que no pasará— dice Sergey, muy serio.

— ¿A qué te refieres?— pregunto haciéndome el tonto.

— Ella no es como las otras que trabajan para mí... Ella trabaja conmigo— dice muy tranquilo.

— ¿A qué te refieres?— pregunto interesado.

— Ella no es una puta como las otras; ella sólo pelea, gana, recibe su dinero y se va. Nunca se ha acostado con nadie aquí... Además ella es mi protegida— dice firmemente.

— Así que le tienes ganas— digo tomando mi bebida.

— Cualquiera le tiene ganas, hasta tú— dice acusándome— Pero a ella, yo la veo como mi hija.

— No importa. Sea como sea va a ser mía— digo muy seguro.

Y en eso se abre la puerta dejando a una Ángel muy ruborizada con un idiota encima de ella.

Ángel De La MuerteDonde viven las historias. Descúbrelo ahora