INEFABLE©

Capítulo 23

Stella

Ser el centro de atención antes no era de mis actividades favoritas. Pero desde que recupere mi confianza y autoestima lo disfruto. Siempre he creído que todo se basa en la actitud.

Si tu te crees una mujer hermosa que siempre se ve bien así va ser. En este momento flashes llegan por varios lados y personas tratando de hacer preguntas que desde mi punto de vista no tienen sentido en este momento.

Preguntan sobre boda y bebés. Por favor, ni siquiera nosotros sabemos si llegaremos a tanto. Sí, la relación es formal y seria, pero apenas estamos empezando como para decidir algo así. Sebastian también parece asustado cuando le preguntan si ya piensa sentar cabeza con la morena que se le ha visto últimamente.

Cuando pasan de hacer sus preguntas y comienzan con las fotos, puedo visualizar a una morena que conozco perfectamente. Esta entrevistando a una pareja que se dedica a la venta exclusiva de todo para bebés.

La palabra bebé esta rondando últimamente mucho por mi vida.

Me separo de los dos dioses con los que llegue y camino hacia ellos. Los reconozco porque mi mamá me los presento hace poco en su ultima visita.

— Señora y señor Horson, que bien lucen ambos. — Me acerco y les doy un beso en la mejilla a cada uno.

— Stella linda, que bueno es verte más seguido en estos eventos. — La señora Horson dice mientras sujeta entre sus manos una mía. — Te veo dentro, estoy harta de tantos flashes. — Cuando estoy por responderle que yo también siento como una mano se pone en mi cintura y dejan un besito en mi sien.

— Buenas noches. — La voz ronca de Daniel podría ser uno de mis sonidos favoritos. Intercambian unas cuantas palabras mientras yo inclino un poco mi cabeza en forma de despedida y comienzo a caminar hacia mi mejor amiga.

Por suerte no esta ninguna cámara prendida. Ni ningún otro reportero porque lo que dice no creo que sea de conocimiento publico.

— Estos jodidos eventos van a terminar dejándome ciega. — Mae dice y luego me abraza. — Maldita, siento que no te he visto en años.

— Eres una exagerada. Solo he tenido días muy ocupados y tu también. — Rueda sus ojos pero sonríe.

— Si a mi también me gustaría estar ocupada con un dios. — Dice y luego ve tras de mi. — Por cierto tengo muchas cosas que contarte pero no por mensaje.

— Hoy me quedo en el departamento de Daniel. — Sube y baja sus cejas insinuando algo. —Pero el domingo podemos tener un día de chicas. — Da unos brinquemos y en eso de la nada se endereza y pone la típica sonrisa agradable que siempre tiene en su programa.

— Mae, se termina el descanso. — Su compañero llega diciendo. — Hola mucho gusto soy Esteban. — Alzo mis cejas porque algo me había contado mi mejor amiga sobre el.

— Esteban ella es Stella mi mejor amiga, Stella el es mi compañero de trabajo. — El voltea a verla como retandola pero no dice nada. — ¿Te importa si te hago unas preguntas rápidas? Me serviría mucho que alguien con influencia me hiciera caso. — Esteban bufa pero se acomoda el auricular que trae.

— Yo te hago caso pero me ignoras. — Sebastian dice detrás de mi. Ni siquiera logro contestarle. Daniel lo observa con una sonrisa burlona. Ni me di cuenta en que momento llegaron.

— Como te decía Stella ¿lista? — Ignora a Sebastian. El camarógrafo se acerca y comienza la toma. Esteban le hace unas preguntas a los chicos mientras Mae me hace unas a mí.

— Te veo dentro. — Me despido y comienzo a caminar. Daniel me alcanza y entrelaza nuestras manos. Volteo a sonreírle y el ya me esta viendo. Escucho el sonido de un foto, pero es diferente a los demás porque se escucha de un celular. Sebastian tiene su teléfono y sonríe muy alegremente.